Los medios informativos de México sí tienen una tradición, pero esta es muy triste. Con escasas 4 o 5 excepciones en todo el país, todos los demás fueron apéndices informativos de los gobiernos nacionales y locales de todo el siglo 20.

El siglo 21 trajo consigo el cambio de régimen en México. El nuevo régimen —ellos se llaman a sí mismos los “gobiernos humanistas”, y muy probablemente tienen razón— ocupó constitucionalmente los cargos, pero entre ellos no había uno que se refiriera al “control de los medios informativos”. Por lo tanto, el nuevo régimen no se ocupó de los medios.

Los medios mexicanos estaban acostumbrados a recibir línea de las autoridades. Las cosas que se publicaban, tanto en tema como en forma, eran rigurosamente autorizadas por el gobierno del régimen viejo. En Yucatán había un medio, el Diario de Yucatán, que jamás se doblegó a las instrucciones federales o estatales. Yucatán era la provincia “bendita” —para algunos— y “maldita” para el régimen viejo. Tan era así, que miembros inteligentes del viejo régimen quemaron públicamente ejemplares del Diario de Yucatán, en un acto político de protesta, porque El Diario decía las cosas que no les resultaban favorables.

La existencia del Por Esto! es una respuesta puntual del régimen para apagar a como diera lugar, la influencia del Diario de Yucatán. Es decir, es un periódico creado con fondos públicos y mantenido con dineros generados por toda la sociedad y concentrados en los erarios públicos. Tuvieron que recurrir a otras formas de hacerse de fondos cuando ya no pudieron recibir más de los gobiernos federal y estatal.

Finalmente, el incipiente movimiento de estudiantes se da cuenta de algo terrible en México: los medios tergiversan los hechos. Solo se dieron cuenta cuando fueron ellos los difamados con mentira. El movimiento #132 responde a haberse dado cuenta —ya era hora— de que los sucesos contra Peña Nieto en la UIA fueron tergiversados para hacer que parezcan menos malos.

¿No se han dado cuenta esos jóvenes y los millones que andan por allí, que esos mismos medios son los que han tergiversado los hechos para denostar en forma insistente a los gobiernos federales que han dado a México las más altas cifras de logros en toda su historia?

¿Por qué está Josefina Vázquez Mota entre el tercero y el segundo lugar, si es la candidata del partido que al gobernar a México, más logros positivos ha generado? (Ver nuestra gráfica en el interior de este número.)

Todos los mexicanos deberíamos salir a las calles y sentarnos en ellas en protesta continua por el #132; lo hemos sufrido durante más de 100 años, y no disminuyó con el cambio de régimen, sino que continuó a favor de los mismos de siempre: los priistas.