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El pasado lunes 2 de julio Benedicto XVI nombró al nuevo Prefecto de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe. Se trata de monseñor Gerhard Ludwig Müller, quien se desempeñaba como Obispo de Regensburg, Alemania.
El Papa, Su Santidad Benedicto XVI
En su nuevo cargo, Monseñor Müller también se constituirá en Presidente de la Pontificia Comisión Ecclesia Dei, de la Pontificia Comisión Bíblica y de la Comisión Teológica Internacional. El Santo Padre lo ha elevado al mismo tiempo a la dignidad de arzobispo y pudiera ser creado cardenal en un próximo consistorio. Sucede en todas estas funciones al cardenal William Joseph Levada, cuya renuncia fue aceptada por límite de edad y quien fuera sucesor en el cargo del cardenal Joseph Ratzinger y estrecho colaborador suyo como Secretario de la Congregación.
La Curia Romana es el organismo de Gobierno de la Iglesia. El Decreto Christus Dominus (para la Misión Pastoral de los Obispos en la Iglesia) así la define en su artículo nueve: En el ejercicio supremo, pleno e inmediato de su poder sobre toda la Iglesia, el Romano Pontífice se sirve de los dicasterios de la Curia Romana, que en consecuencia, realizan su labor en su nombre y bajo su autoridad, para bien de las Iglesias y servicio de los sagrados pastores. Los dicasterios son dependencias de la Santa Sede, similares a las secretarías de los gobiernos seculares.
Los prefectos y presidentes de los diversos dicasterios han sido nombrados en su oportunidad por Benedicto XVI, al punto de que hoy es posible afirmar que la Curia ha sido totalmente renovada en este pontificado. No obstante, son inminentes más cambios, de los que el más esperado y anunciado corresponde al Secretario de Estado, el cardenal Tarcisio Bertone, quien el 2 de diciembre cumplirá 78 años de edad y quien ha sido la principal víctima de la filtración y publicación de documentos privados de Benedicto XVI.
Son previsibles algunos nuevos nombramientos, tal vez para el año próximo. Es el caso de los cardenales que deberán presentar la renuncia a sus respectivos cargos dicasteriales por límite de edad a los 75 años, como establece el Código de Derecho Canónico: Ángelo Amato, Prefecto de la Sagrada Congregación para las Causas de los Santos; Manuel Monteiro de Castro, Presidente del Tribunal de la Penitenciaría Apostólica; Antonio María Vegliò, Presidente del Pontificio Consejo para la Pastoral de Migrantes e Itinerantes, y Francesco Coccopalmerio, Presidente del Pontificio Consejo para los Textos Legislativos.
Revisemos ahora la composición de la Curia Romana, con nombres y edades de sus prefectos y presidentes:
Congregaciones.- Iglesias Orientales: cardenal Leonardo Sandri (69 años). Doctrina de la Fe: arzobispo Gerhard Ludwig Müller (64 años). Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos: cardenal Antonio Cañizares Llovera (67). Evangelización de los Pueblos: cardenal Fernando Filoni (66). Clero: cardenal Mauro Piacenza (68). Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica: cardenal Joao Braz de Aviz (65). Educación Católica: cardenal Zenon Grocholewski (73). Obispos: Marc Ouellet (68).
Tribunales: Supremo de la Signatura Apostólica: cardenal Raymond Leo Burke (64). Rota Romana: Monseñor Antoni Stankiewicz, Decano (77).
Pontificios Consejos.- Laicos: cardenal Stanislaw Rylko (67). Promoción de la Unidad de los Cristianos, y Relaciones religiosas con el judaísmo: cardenal Kurt Koch (62). Familia: Monseñor Vincenzo Paglia (67). Justicia y Paz: cardenal Peter Kadwo Appiah Turkson (64). Cor Unum: cardenal Robert Sarah (67). Pastoral de la Salud: cardenal Zygmunt Zimowski (63). Diálogo interreligioso: cardenal Jean Louis Tauran (69). Cultura: cardenal Gianfranco Ravasi (69). Comunicaciones Sociales: cardenal Claudio María Celli (70). Promoción de la Nueva Evangelización: cardenal Rino Fisichella (60).
En estos días, muchas miradas se dirigen al cardenal Secretario de Estado, Tarcisio Bertone, entre otras razones porque ha excedido el límite de edad, porque ha sido piedra de conflicto en la filtración de documentos privados y porque el Papa le ha manifestado su aprecio en una carta publicada apenas esta misma semana. Mientras tanto, crecen las suposiciones de que será para octubre cuando Benedicto XVI nombre al sucesor del cardenal Bertone, así que otros cambios previsibles serían los de monseñor Ángelo Becciu, Sustituto para Asuntos Generales y monseñor Dominique Mamberti, Sustituto para las Relaciones con los Estados, ambas oficinas dependientes directamente de la Secretaría de Estado, así que es de preverse que el nuevo Secretario nombre a sus dos nuevos colaboradores de mayor cercanía.
Para cuando el Papa haga el relevo en la Secretaría de Estado, que será normal por la edad de su titular, muchos dirán que es a consecuencia de las presiones por la filtración de documentos, argumento éste que ya no sorprende a nadie. En cambio, lo que sí hace expectación es la nacionalidad de quien será el número dos del Vaticano.