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WASHINGTON D. C., 9 de julio.- Estados Unidos ya tiene un congresista casado con una persona de su mismo sexo. Se llama Barney Frank, y es un demócrata de izquierdas de Massachusetts, uno de los siete estados (además del distrito de Columbia, donde está la ciudad de Washington, y de una reserva india del estado de Oregón) que reconocen el matrimonio homosexual.
Frank se casó el sábado con su pareja desde hace años, Jim Ready, en una ceremonia en el Hotel Marriott de Newton, en Massachusetts, a la que acudieron más de 300 personas, entre ellas el senador por ese Estado y candidato a la presidencia en 2004, John Kerry, y la jefa del grupo demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Oficialmente, el presidente Barack Obama no fue invitado porque Frank no quería excesivas medidas de seguridad en la ceremonia.
Barney Frank (de lentes) se casó con James Ready, su pareja desde hace años y se convirtió en el primer miembro homosexual de la Cámara de Representantes en activo en contraer matrimonio
Paradójicamente, el hecho de que Barney Frank sea el homosexual con más peso en la política en EE. UU. se debe a Juan Pablo II. Frank, judío, ganó su escaño en 1980, cuando el jesuita Robert Drinan dejó su escaño después de que Juan Pablo II pidiera al clero que no ejerciera cargos políticos en ningún lugar del mundo.
En todo caso, Frank no va a ser la única persona en un matrimonio gay en el Congreso de EE. UU.... porque va a dejar de ser congresista. Tras 32 años en la Cámara de Representantes, Frank, de 72 años, no se presenta a las elecciones de noviembre y se retira de la política.
Frank salió del armario en 1987, después de la muerte por sida del congresista republicano Stewart McKinney, que había ocultado su bisexualidad toda su vida. El morbo sobre la vida privada de McKinney irritó tanto a Frank que decidió hacer pública su homosexualidad.
Frank ha estado en el centro de muchos escándalos en EE. UU.. En su calidad de presidente del Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes recibió abundantes contribuciones de las empresas con títulos de hipotecas Fannie Mae y Freddie Mac. Estas dos empresas, que funcionaban con garantía del Estado, compraban hipotecas a los bancos y a su vez las vendían en el mercado. La llegada del colapso del mercado inmobiliario en 2008 hizo que 'Fannie' y 'Freddie' tuvieran que ser nacionalizadas a un coste para el contribuyente cercanos a los 157,000 millones de dólares.
El congresista también tuvo su cuota de escándalos sexuales cuando se descubrió que había contratado los servicios sexuales de un proxeneta, Stevie Gobie, con el que acabó teniendo una relación amorosa. Gobie mantuvo entretanto su actividad en la prostitución, lo que hizo que Frank fuera objeto de una sanción verbal de la Cámara de Representantes.
Uno de los mayores críticos por su orientación sexual fue el republicano Larry Craig, que en 2007 fue arrestado en el aeropuerto de Minneapolis cuando trató de comprar los servicios sexuales de un policía que se estaba haciendo pasar por proxeneta. (ELMUNDO)