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MADRID, 15 de febrero.- Los fragmentos del meteorito que han caído este viernes en Rusia podrían alcanzar un alto valor en el mercado según su procedencia. Así lo ha determinado Rafael Lozano, un experto del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), quien ha señalado que, en caso de que estén formados de «alondrita» -cuyo origen es planetario-, su precio podría ser de hasta 10 veces su peso en oro.
Por ello, el investigador ha determinado que, probablemente, los cientos de afectados de las regiones del centro de Rusia y del norte de Kazajistán pasarán «del horror y las lágrimas a la alegría» en poco tiempo. «Muchos se los quedarán de recuerdo y otros los venderán», ha afirmado. Sin embargo, el experto también ha señalado que, como los fragmentos recogidos serán muchos, el valor probablemente descenderá.
Investigadores alemanes analizan la presión del meteorito al atravesar la atmósfera. La señal fue relativamente larga e indica la trayectoria del cuerpo celeste. Si el impacto en la tierra no fue catastrófico, se debió a la pulverización de la roca celeste. (DPA)
No obstante, ha remarcado que el precio dependerá del material del que estén hechos los fragmentos. De esta forma, si es una «condrita ordinaria» valdrá menos que una «alondrita», que es menos común.
Lozano ha precisado que las condritas están formadas por cóndrulos, que son rocas primordiales (de las más antiguas del sistema solar). A su vez, el experto ha señalado que las alondritas tienen un valor mucho mayor porque se tratan de un meteorito que deriva de un planeta.
«Podría ser un meteorito marciano, que ha sido lanzado de Marte tras el impacto de un meteoro en ese planeta y que, a su vez, haya provocado la eyección de material marciano al espacio (…) esos son los más raros y valiosos», ha agregado. El investigador ha subrayado que el último meteorito de Marte cayó en Marruecos y alcanzó 10 veces su precio en oro.
Respecto al fin del meteorito, Lozano ha señalado que hay dos vertientes principales: el coleccionismo (por parte de particulares o instituciones) y la investigación (ya que se trata de «muestras interesantes» al provenir de Marte o del cinturón de asteroides, dos lugares inaccesibles).
En España también han caído algunos meteoritos, como el de Villalbeto de la Peña (Palencia) el 4 de enero de 2004 o el de Puerto Lápice (Ciudad Real), el 10 de mayo de 2007. Según Lozano, en ambos caso sucedió algo parecido a lo acontecido este viernes en Rusia aunque «no tan espectacular».
Respecto al peligro que suponen, ha indicado que tanto en Rusia como en los últimos registrados en España pueden pesar hasta un kilogramo, por lo que los daños no son muy importantes. «Depende del objeto, pero para causar daños importantes debería ser mucho más grande y, si es muy grande da igual donde caiga, porque entonces puede suponer daños graves», ha advertido Lozano.
En todo caso, ha agregado que la NASA tiene un programa de seguimiento de meteoritos y asteroides para controlar los más grandes. A su juicio, si algo como lo sucedido este viernes ocurriese sobre una central nuclear u otras instalaciones peligrosas, no pasaría nada, porque se trataría de una lluvia de piedras «no muy grandes». De hecho, determina que la de Rusia ha dejado numerosos heridos, sobre todo por rotura de cristales, pero ningún muerto. (European Press)