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Esposas de pescadores de Sisal e investigadores de la UNAM anunciaron que remontando todas las adversidades, en octubre próximo iniciará la construcción de su nueva granja de pulpo, con mayor capacidad, con nueva imagen institucional y con el estreno de su patente, que le otorga el reconocimiento como la única de su tipo a nivel internacional.
La Organización Mundial de la Propiedad Intelectual emitió la patente WO 2010/030155 A1 a la granja de pulpos de Sisal y con ello, se reconoce de manera internacional que sólo en Yucatán se producen los cefalópodos en cautiverio, anunció el Dr. Carlos Rosas Vázquez, investigador de la Unidad Multidisciplinaria de Docencia e Investigación de la Universidad Nacional Autónoma de México.
La patente se puede ver en la página oficial www.wipo.int de la World Intellectual Property Organization. La categoría A1 confirma que es la única que produce pulpos en cautiverio a nivel mundial.
Promotor de un proyecto que busca garantizar empleo y recursos a las familias de los pescadores, Rosas Vázquez informó que sobre las cenizas que dejó un siniestro hace cinco meses, será reconstruida la granja en los meses de octubre o noviembre próximo. Aclaró que las mujeres de la cooperativa Moluscos del Mayab no han dejado de trabajar y en estos momentos producen, en un pequeño laboratorio experimental, un millar de pulpos al mes.
Esa granja surgió con la idea de ofrecer a los pescadores una alternativa concreta de ingresos durante el período de veda del pulpo, ya que esa especie sólo se puede extraer del 1 de agosto al 15 de diciembre. En Sisal, los investigadores de la UNAM establecieron una alianza con un grupo de mujeres: ellas formaron la cooperativa Moluscos del Mayab y luchan contra viento y marea por concretar la primera granja de pulpos comercial del mundo.
En agosto pasado, un incendio redujo a cenizas el esfuerzo de las mujeres e investigadores. Casi al mismo tiempo, un grupo de personas invadió el terreno donde se planea construir la granja comercial y quemó sus pertenencias.
Pero los ataques no minaron su objetivo. El Dr. Rosas Vázquez reveló: Ya inició el proceso de reconstrucción de la granja. Está en elaboración el proyecto ejecutivo, con base en los procedimientos y tiempos que establece la UNAM. Sin embargo, nuestra producción no se detiene, porque seguimos produciendo pulpos a través de la unidad experimental.
En plática con el presidente de la Fundación Produce Yucatán, A.C., Pedro Cabrera Quijano, el investigador recordó que esa granja es el fruto de un proyecto de investigación que adoptaron esposas de pescadores de Sisal, como una alternativa socioeconómica ante el descenso en los niveles de captura de las distintas pesquerías locales. Ese proyecto ya logró reconocimientos a nivel nacional e internacional, al grado que el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura lo nominó como un caso de éxito factible de aplicarse en otros países en vías de desarrollo.
Los moluscos que nacen en cautiverio, de la variedad conocida a nivel mundial como pulpo rojo yucateco, tienen gran demanda en el mercado de la alta cocina y como animales de ornato.
El Dr. Rosas Vázquez apuntó que la Fundación Produce Yucatán canalizó recursos a la investigación, validación y transferencia tecnológica de esa granja y en agosto pasado, fue la primera instancia que se comprometió a realizar las gestiones necesarias para la inmediata recuperación del proyecto.
Las mujeres que creen en el proyecto asumieron el incendio de su esfuerzo como un reto. No han dejado de trabajar: lograron definir una imagen institucional, diseñada por estudiantes de la Universidad Anáhuac- Mayab y en la unidad experimental producen un promedio de mil crías al mes, indicó.
Como se aprendió de la experiencia de la granja original, el nuevo diseño será más funcional y con mayor capacidad, adelantó.
La unidad experimental tiene capacidad para la reproducción de diez pulpos hembras. La futura granja tendrá capacidad para la reproducción de 104 hembras, así que calculamos una producción de 6,000 crías mensuales, concluyó.