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CIUDAD DE MÉXICO (06/OCT/2011).- El presidente Felipe Calderón comparó la situación que prevalece en esta etapa previa a la elección presidencial de 2012 con la de 2006, cuando superó las condiciones adversas en que lo ubicaban las encuestas y se alzó con el triunfo.
El mandatario participó en el Foro "México 2011: La Transformación desde Abajo", donde ofreció una entrevista al jefe de la Oficina de la Revista "The Economist", Tom Wainwright, quien le preguntó cómo ve las campañas para el próximo año, comparadas con hace seis años.
"Te voy a hablar cómo veo la campaña: un candidato que parece que es invencible, un partido que ya se asume como el ganador inefable. Un proceso interno en el PAN realmente democrático e incierto en su resultado y, finalmente, el resultado es totalmente diferente a lo que la gente pensaba. Estoy hablando de la campaña de 2006", dijo.
Enseguida, el directivo de The Economist preguntó que 'entonces no ha cambiado nada', a lo cual, el titular del Ejecutivo federal respondió: 'los candidatos ¿no? pero lo demás está más o menos igual'.
En un hotel de la zona de Santa Fe, escuchó todo tipo de preguntas del entrevistador, y luego accedió a responder algunas del público.
En torno a la forma en que ha cambiado la relación del presidente de la República y los mexicanos, Calderón Hinojosa hizo notar su voluntad de dialogar con los ciudadanos.
El Ejecutivo federal recordó que el régimen político mexicano fue autoritario y no democrático durante muchas décadas, y el presidente no era cuestionado, además de que 'era impensable' que dialogara 'ya no digamos con los ciudadanos, sino, incluso, con los congresistas'.
Expuso que ahora hay una Presidencia que es democrática, que no tiene ni remotamente el enorme poder que tenía y donde se ha dialogado, por ejemplo, con Javier Sicilia, quien encabeza una organización social que lucha por la seguridad.
'La verdad, yo he tenido, yo creo que una veintena de diálogos públicos. Desde este (con Javier Sicilia), que es quizá uno de los más conocidos, pero he dialogado con víctimas en todo el país, con la gente de Ciudad Juárez y con las madres de jóvenes asesinados'.
Afirmó que ha hecho un esfuerzo significativo por reducir la distancia entre el presidente y los ciudadanos y 'yo creo que hay una retroalimentación mucho más eficaz y mucho más cercana a la gente'.
'Hay más sensibilidad acerca de lo que la gente piensa. Hay menos distancia y menos aislamiento, que era un mal crónico del Poder, era el aislamiento respecto de la ciudadanía. Ahora no es así, a mi juicio', sentenció.
En materia de seguridad, sostuvo que la violencia en México creció porque el crimen organizado pasó de solo trasladar droga a Estados Unidos a una actividad de narcomenudeo.
Felipe Calderón subrayó que en el presente año el crecimiento de la violencia en el país es menor al de años anteriores, y vislumbró que nos encontramos en un 'punto de inflexión' en el tema.
Respecto a las opiniones de algunos ex presidentes de países de América Latina con relación a la legalización de la droga, indicó que 'prefiere actuar como presidente y ellos prefieren actuar como ex presidentes. Es una diferencia medular'.
'Hasta hubiera sido deseable que todos ellos hubieran actuado como presidentes o hubieran puesto en práctica lo que ahora dicen como ex presidentes. Yo prefiero más bien actuar ahorita', expresó.
Entre las preguntas se le recordó el tema de la empresa 'Hildebrando', propiedad de uno de sus cuñados, y la forma como ha reforzado las acciones anticorrupción.
Puntualizó que 'la absoluta transparencia ha demostrado que apenas pasó la campaña, no hubo nadie que presentara absolutamente ninguna evidencia de lo que fue una gran calumnia'.
Calderón Hinojosa dijo que es falsa la acusación de que otorgó contratos públicos a su cuñado Hildebrando Zavala, quien incluso al llegar a la Presidencia dividió su empresa y vendió la parte que tenía contratos con el servicio público, equivalente a 10 por ciento.
El presidente de la República indicó que esa gran calumnia fue tan falsa 'que la misma persona que dijo que tenía encuestas, que iba 10 puntos arriba de mí, y que seis años después no ha mostrado, tampoco ha demostrado ninguna evidencia de lo otro'.
(El Informador)