Comienza ahora, que aumenta la efervescencia electoral, la manipulación de los recursos federales del FIDEM que es un fideicomiso del gobierno federal para apoyar las áreas prioritarias o estratégicas del desarrollo en estados y municipios. El gobierno de Ivonne Ortega se apresura a servirse con la cuchara grande, a despecho de las penurias que el pueblo deba pasar, tanto para satisfacer su insaciable codicia, como para aprovechar hacer un guardadito para las campañas que se avecinan.

Mauricio Sahuí, uno de los coordinadores del bisne con los recursos del FIDEM

Dichos recursos estan siendo manejados por el camaleón de la política, Willian Sosa Altamira, conocido operador político y financiero de Rolando Zapata Bello, que en unión del flamante diputado Mauricio Sahuí Rivero, pretenden hacer su agosto, utilizando el siguiente modus operandi: Se ha ofrecido que estos codiciados apoyos llegarán a diez municipios importantes, de los cuales, ya firmaron el acuerdo o convenio, los alcaldes de Tekax, Fernando Romero, de Valladolid, Gonzalo Escalante Alcocer, el de Ticul y otros mas.

La transa es de la siguiente manera: se van a contratar obras, a las cuales se les va a triplicar o cuadruplicar su valor. Dichas obras se van a realizar con empresas constructoras controladas por el diputado Juan José Canul Pérez, en unión de Mauricio Sahuí Rivero, el secretario de obras públicas Francisco Torres Rivas, el consejero jurídico Sergio Cuevas y nada mas y nada menos que el plenipotenciario e intocable fiscal del estado, Héctor Cabrera Rivero.

Juan José Canul: El negocio se hará, a través de constructoras controladas por él y Sahuí.

Según pudimos averiguar, a través de fuentes confiables en palacio de gobierno, de entrada los despachos de Sergio Cuevas y de dos caballeros poblanos ya avencindados en nuestro hospitalario estado que aguanta todo, cuyos nombres son David Estrada y Ariel Juárez, por trámites y gestiones ante las instancias correspondientes, se van a llevar el 14 por ciento del monto de las utilidades.

Después viene lo bueno: si la obra tuviera un costo real de millón y medio de pesos, se inflará a cuatro millones y la diferencia entre el costo real y la utilidad se dividirá entre los alcaldes, los funcionarios y diputados que operan este programa. ¿Quien se atreve a negar que Yucatán es la tierra donde los sueños se hacen realidad?

Dentro de este nuevo crimen cometido contra la ciudadanía, hubo algunos alcaldes honorables que no aceptaron tener arte ni parte en la repartición del botín, toda vez que tienen dignidad y quieren a su estado, incluyendo a la alcaldesa de Tekantó, Liliana Araujo Lara que no aceptó, no por honorabilidad sino porque ella va a ser la presidenta del DIF, ahora que su hermana sea gobernadora y no conviene avorazarse, si el festín es un hecho, comentó.

Así pues, todo esta listo para que los diputados, funcionarios estatales y el fiscal del estado, pongan manos a la obra con los recursos del FIDEM.