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Tres estrellas
Imitando las estrategias comerciales de "Harry Potter", la franquicia "Crepúsculo" divide su última entrega en 2 partes. "Amanecer Parte 1" es la primera de dos películas que concluirán la edulcorada historia de amor entre Bella y Edward.
Conviene retomar lo que en otras ocasiones he escrito a propósito de "Crepúsculo". La saga es la degradación del tema vampírico a telenovela juvenil. La "escritora" Stephenie Meyer tiene el único tino de satisfacer los sueños amorosos de chicas adolescentes. Desgraciadamente, Meyer no tiene el talento de J. K. Rowling para desarrollar tramas complejas. Es por ello que "Crepúsculo" opta por una historia simple que hecha mano de todos los clichés melodramáticos, incluyendo un abierto contenido moralista en torno al sexo premarital y el aborto.
"Crepúsculo" se ha convertido en un producto fílmico muy redituable, tanto por la simpleza de su historia, como por haber incluido a los modelos Robert Pattison y Taylor Lautner en su elenco. Aunque ambos galanes están negados de todo talento histriónico, saben cómo alborotar las hormonas de las adolescentes y llenar de dólares la taquilla.
Para cerrar el triángulo amoroso, típico de todo melodrama, aparece la joven Kristen Stewart quien resulta aún peor a la hora de actuar. En sus cuatro películas como protagonista de esta saga, Stewart ha resuelto cualquier problema interpretativo con una estéril mueca de angustia. La misma gesticulación le ha servido si su novio la besa, su padre la regaña, le hacen el amor, intentan matarla o está dando a luz. Es como una versión femenina y actual de Buster Keaton, con la diferencia que Keaton lo hacía a propósito.
"Amanecer Parte 1" es la cuarta entrega y se desarrolla en 2 grandes bloques: la primera hora se centra en los problemas sexuales entre los recién casados Edward y Bella. Pues resulta que la condición de vampiro de Edward lo hace muy violento a la hora de intimar con Bella y el joven teme hacerle daño. La segunda parte se refiere al embarazo de Bella y nos muestra cómo el crecimiento del feto-vampiro empieza a consumir la salud de la futura madre.
La primera parte abusa de la cursilería, diálogos superfluos y un sentido del humor forzado y simple. Para rematar, la banda sonora nos satura de baladas melosas que, aunadas al excesivo romanticismo de la pantalla, provoca que de la pantalla broten caudales y caudales de miel.
La segunda hora mejora considerablemente, pues la anécdota tiene más fuerza dramática y, por ende, resulta más efectiva. La vida de Bella está en peligro, pues el bebé que lleva en el vientre no es humano y la salud de la embarazada se deteriora conforme el producto crece. Bella acaba más flaca que Victoria Beckham pero se empeña en dar a luz y sacrificar su vida. A juicio personal, el mejor momento de todo el filme es la secuencia del parto. Parece extraído de una película de horror y logra darle al filme un poco de contraste.
Por otra parte, "Amanecer Parte 1" lleva los mismos defectos de sus predecesoras. Y aunque las fallas de continuidad ya no son tantas como en "Luna nueva", persiste la musicalización excesiva e ineficiente. Argumentalmente, las mismas inconsistencias: Edward propiciando encuentros entre Bella y Taylor para luego ponerse celoso ¿Quién entiende a este vampiro?
Lo mejor: la segunda hora centrada en el embarazo de Bella
Lo peor: la primera hora puede resultar empalagosa.