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La participación de la sociedad en los asuntos de interés colectivo es imprescindible para un orden social equilibrado y para la búsqueda del bien común, indicó el licenciado Eduardo Seijo Gutiérrez, al ser entrevistado con motivo de la conferencia "El Compromiso Ético Social Ciudadano", para un auditorio integrado por ciudadanos e integrantes de diversas organizaciones intermedias.
Los ciudadanos tenemos el deber de participar en la vida cívica, no es algo opcional. Uno de los elementos básicos para la convivencia pacífica es que todos los que integramos una comunidad pongamos nuestro granito de arena para la búsqueda del bien común, de manera que si la sociedad civil no asume su compromiso de contribuir al respecto y le dejas todo a la autoridad, esto no será factible.
La sociedad civil cede el poder a la autoridad para que ésta conduzca a la sociedad hacia semejante estadio. Pero si la sociedad no participa, el bienestar colectivo no se alcanzará, ni la autoridad a la que se dio poder y recursos trabajará a favor de semejante objeto.
El ciudadano tiene, a su vez, que pedirle, a la autoridad, cuentas de los recursos que le otorga y ésta, solicitar y requerir al ciudadano su contribución y participación al efecto.
No podemos estar encerrados y negarnos a participar como ciudadanos en los asuntos de interés público. Es egoísta y es absurdo, aseveró. La interdependencia social es una realidad en este sentido y además hay que hacerlo por el propio beneficio de la persona.
La gente muchas veces se niega a participar socialmente por estar sumida en un indiferentismo, donde solo le interesan sus circunstancias particulares. También se niega por una cuestión de egoísmo social, ignorancia y ansia de comodidad, pues se arguyen circunstancias de toda índole para no hacerlo. Contribuye también el miedo, cuando un gobierno es autoritario y reprime al pueblo, la gente adquiere temor de sufrir algún daño en su persona, familia o propiedades.
Aquí en Yucatán estamos viviendo claras injusticias y sucesos que contribuyen a generar temor: intimidación a la prensa y a periodistas que no se subordinen a lo dispuesto por las autoridades, agresiones a ciudadanos, a políticos y coadyuva a ello el comportamiento despótico del aparato oficial impartiendo justicia a conveniencia, no pagando a proveedores y con otras conductas similares.
Participar es pues, un deber social que no podemos ignorar o desestimar, porque la participación se desprende de otro principio social que es la subsidiaridad. Si un gobierno permite a una instancia menor como es la familia, realizar sus propias actividades, sin intentar cooptarla, eso entraña el compromiso de interesarse por lo que es de todos.
La charla va dirigida a todas las personas de buena voluntad, porque todos los seres humanos tendemos naturalmente hacia lo bueno y la buena voluntad nos permite encontrar coincidencias, que son herramientas imprescindibles para la búsqueda del bien común.
Intentaremos despertar la conciencia social de los participantes. Intentaremos infundir la convicción de que debemos formar parte de una sociedad activa donde unos nos hagamos solidarios con otros, donde no vamos a conseguir mejorías sustanciales si nos enconchamos o somos apáticos o tenemos miedo o somos egocéntricos.
Creo que se ha ido fortaleciendo la conciencia social en la gente. Empero, a veces por temor no dice nada pero en los procesos sociales, los individuos que se sienten más identificados con ciertos principios deben de dar el ejemplo para que otros los sigan.
La exposición estará sustentada en principios filosóficos humanistas, que resultan aceptables a prácticamente cualquier ser humano más allá de su credo religioso o político, máxime cuando se hace gala de buena voluntad, acotó.
Felicito a Artículo Siete y a todo su equipo, por el interés mostrado en constituirse en un medio de comunicación preocupado por defender la libertad de expresión y por la búsqueda del bien común, finalizó.