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MOMBASA, 27 de agosto.- Cientos de manifestantes destrozaron autos y cometieron actos de vandalismo en al menos cuatro iglesias de la ciudad keniata de Mombasa el lunes, luego de que hombres no identificados mataran de un disparo a un clérigo musulmán acusado por Estados Unidos de ayudar a militantes islamistas en la vecina Somalia.
Aboud Rogo Mohammed, a quien Washington acusaba de promover la radicalización y el reclutamiento de africanos no somalíes para el grupo militante al Shabaab, recibió un disparo letal el lunes y fue sepultado poco después.
Rogo enfrentaba cargos por planeación de acciones terroristas e importación de armas ilegales.
La niña que llora viendo a su desolado abuelo es hija del clérigo asesinado, Aboud Rogo, quien iba al volante y cuyo cadáver ensangrentado vemos. El crimen ha causado disturbios en Mombasa. (Associated Press)
"Estaba conduciendo un auto personal en el que iban otras cuatro personas. Hombres desconocidos atacaron su vehículo (...) lo balearon y lo mataron en el acto", dijo Robert Kitur, vicejefe de policía de la región.
"Deben de haber estado buscándolo a él y deben de haber estado rastreándolo por un tiempo", agregó.
La policía de Kenia disparó al aire balas de goma e intentó dispersar con gases lacrimógenos a los manifestantes en Mombasa, la principal ciudad portuaria del país y popular destino turístico, que cuenta con una elevada población musulmana.
Cientos de manifestantes apedrearon vehículos en la principal carretera que une Mombasa con Mali, otro punto turístico, y quemaron neumáticos para evitar que los automóviles transiten. También destrozaron ventanillas y luces al grito de eslóganes en árabe, antes de ser dispersados con gases lacrimógenos.
Otros, cometieron actos vandálicos en al menos cuatro iglesias en las afueras de la ciudad, donde rompieron sillas y derribaron un altar.
Los comercios en Mombasa fueron cerrados, mientras policías armados patrullaban las calles usualmente llenas de compradores y turistas extranjeros. En tanto, muchas personas se protegían manteniéndose dentro de sus casas.
Los manifestantes culpan a la policía del asesinato de Rogo.
"La policía ha matado a nuestro inocente jeque. Le dispararon y lo mataron. Impusieron sobre él cargos terroristas, lo arrestaron y acusaron; temían que la corte lo exima y decidieron terminar con su vida", dijo Suleiman Athman, un joven musulmán que participaba de la manifestación.
"Es un ataque a los musulmanes y no lo tomaremos a la ligera", agregó. (Reuters)