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Era conocido como El Negro Fidel, lider estudiantil de la Facultad de Economía y de la Federación Estudiantil Universitaria, en la época de los años setenta, la época del poder estudiantil, donde en nuestra entidad brillaba con luz propia, la estrella de Efraín Calderón Lara, El Charras, el malogrado líder estudiantil asesinado se dice por órdenes de Carlos Loret de Mola, que no fue capaz de controlar los conflictos que el inquieto lider desataba por aquí y por allá entre los trabajadores de nuestra entidad.
Fidel Rodríguez Mézquita: el ejemplo de Efraín Calderón Lara es una herencia para mis hijos y un modelo para la comunidad
Jóvenes con ideales.- Rodríguez Mézquita afirmó que el estudiantado de entonces, era muy diferente al actual, integrado por jóvenes con ideales marcados por un acentuado sentido social y obviamente por líderes con características distintas a los que hasta entonces, habían conducido la suerte del estudiantado yucateco, como los de la Federación Estudiantil Yucateca (FEY) y la propia FEU, que habían llevado a la dirigencia a personas que incluso no eran estudiantes.
Es en la Facultad de Economía de aquel entonces, (que tenía fama de socialista) donde se genera el parteaguas del que surgen nuevos liderazgos, como el propio Rodríguez Mézquita, Víctor Sierra, Manuel Alonzo, José Calderón y otros. De esta manera, Economía en un término de dos años logra tener el control de la FEU.
Rodríguez Mézquita no solo fue alumno de la Facultad de Economía, sino que fue presidente y consejero del plantel, asi como Presidente de la Federación Estudiantil Universitaria. Aunque él aseguró lo contrario, la gente de la época, lo vinculó junto con Efraín Calderón Lara a la influencia política de Víctor Cervera Pacheco, quien se dice los apoyaba a ambos.
El Charras.- Nuestro entrevistado afirmó que al Charras, como cariñosamente motejaban a Calderón Lara, lo conoció por ser vecino igual que él, del rumbo de Santiago y merced a ello, coincidían en fiestas, independientemente que su hermanito José era también su amigo, pues era dirigente de ingeniería.
Los estudiantes de diferentes escuelas de aquel entonces, manifestó apoyaban las causas sociales de diferentes estratos de la población y por ende, apoyaban a Calderón Lara, que era un inquieto pasante de la entonces escuela de jurisprudencia, que se destacó por su actividad como asesor jurídico de sindicatos independientes como el Jacinto Canek de los camioneros, de los zapateros y el de los obreros que trabajaban para la empresa CUSESA, entonces encargada de la construcción del fraccionamiento Campestre.
Se dice que la actividad de Calderón Lara con los obreros de esta empresa, fue el detonante de su secuestro y posterior asesinato, pues se decía que la empresa almacenaba grandes cantidades de explosivos, que de caer en manos de Calderón Lara y sus seguidores, podrían ser utilizados de manera peligrosa.
Socialistas.- Algunos empresarios tildaron a Calderón Lara y sus seguidores de socialistas, pero Rodríguez Mézquita no aceptó esto, sino que dijo que se trataba de un grupo de idealistas con tendencias al cambio, como es común entre los jóvenes y por eso mismo, el asesinato de Efraín Calderón Lara fue un crimen injustificado e incalificable, que aunque muchos achacan en su autoría al ex gobernador Carlos Loret de Mola y Mediz, en lo personal él consideraba que más bien fue algo ordenado por algún subalterno ansioso de quedar bien con el titular del ejecutivo, como el entonces jefe de la policía, teniente coronel José Gamboa, que seguramente dio la orden a algunos de sus elementos, a los que lamentablemente, se les pasó la mano.
Destacó que es falsa la versión que afirma que Calderón Lara logró liberarse de sus ataduras y que atacó a sus captores pues era experto en artes marciales, viéndose estos en la necesidad de matarlo. Efraín Calderón era de una complexión extremadamente delgada, bajito de estatura, nunca fue amigo de pleitos y golpes, mienten quienes hablaban de que había recibido entrenamiento paramilitar, como también lo hacen quienes afirman que era un fósil, era un buen alumno, que ya había terminado la carrera, pues era pasante y que se encontraba en proceso de titularse. Lo que resulta más creíble es considerar que reconoció a alguno de sus captores y amenazara denunciarlo y en esa virtud, decidieran asesinarlo.
Sindicatos apoyados por el gobernador.- Reiteró que apoyar a los sindicatos independientes como hicieron, no era necesariamente oponerse al gobierno, toda vez que el propio gobernador Loret de Mola auspiciaba la formación de estos (No olvidemos que Raymundo Vargas Cruz, actual presidente de la Unión de Camioneros, expresó que le crearon a la empresa un sindicato blanco).
Efraín Calderón era un hombre preocupado por las injusticias, era un dirigente que estaba del lado de las clases más necesitadas, resalta, no era un problema para las autoridades, toda vez que mantuvo siempre diálogo con el gobierno y específicamente con el gobernador, que siempre dio facilidades para ello, si hubiera sido otro el titular del ejecutivo, difícilmente hubiera habido tanto diálogo, recalcó.
Los líderes estudiantiles pensamos que a Efraín lo habían detenido e incomunicado, nunca creimos que lo hubieran asesinado. Tras el cobarde homicidio, los estudiantes convocamos una serie de marchas y protestas, que conmovieron la ciudad y el estado y que provocaron episodios tan lamentables, como que la policía de Loret de Mola tiroteara el edificio central de la universidad, haciendo caso de un rumor que aseguraba que ahí se almacenaban armas. Las marchas dieron como resultado igualmente, que varios de los líderes estudiantiles de entonces fuéramos a dar a prisión acusados de ilícitos tan absurdos como portación de armas, apología del delito y el favorito de las autoridades de entonces: disolución social.
Los estudiantes de antaño, tenían inquietudes de carácter social que actualmente no tienen: Fidel Rodríguez Mézquita
Buenas amistades.- En esa época, las agrupaciones estudiantiles dependían directamente del gobierno, que las patrocinaba, como ocurría con la FEY y la FEU, las relaciones que existían en aquella época eran con los funcionarios y autoridades emanados del PRI, pues era la época en que este partido, era prácticamente único, pese a ello, manifestó que él nunca fue parte del PRI, aunque se estilaba para tomar casi cualquier dirigencia estudiantil vincularse a éste partido.
Nosotros llevábamos una relación respetuosa, pero no éramos del partido, de lo contrario, no habríamos protestado por la muerte de Efraín, indica.
El movimiento estudiantil fue desbaratado, a muchos líderes los persiguieron y otros fuimos a la cárcel, reitera. De esta manera, lo que sucedió fue que muchos dirigentes estudiantiles se radicalizaron, al grado de militar en partidos de izquierda y otros se asimilaron al sistema, como el propio hermano de Efraín, José Calderón Lara, que fue secretario de obras públicas durante el periodo de Dulce María Sauri como gobernadora.
Un legado.- La experiencia como lider estudiantil y el ejemplo de Efraín Calderón Lara, son una herencia de vida para mis hijos y para nuestra comunidad en general, un legado valioso, expresó. Sin ánimo de vanagloriarme, intenté seguir ese camino, tan que es así, que trabajo en mi taller mecánico, por mi cuenta, sin haber intentado como otros, utilizar mi liderazgo estudiantil para hacer carrera política, finalizó.