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El infarto al miocardio, que es la principal causa de muerte mundial, sí se puede prevenir; la clave de todo está en el control del peso, aseguró el Dr. Armando Fernández González, cardiólogo del hospital "Ignacio García Téllez" del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Dio a conocer que esta enfermedad, que desde hace 20 años comenzó a aparecer en personas de menor edad a lo visto anteriormente, está asociada "en un 99.9%" con la obstrucción de arterias del corazón, lo que ocasiona la pérdida de una parte del tejido muscular cardíaco, por la mala circulación.
Explicó que la obstrucción de las paredes lisas de las arterias se da con la grasa, ocasionada, por ejemplo, por un elevado colesterol.
—Desde que cambiaron los hábitos alimenticios de personas que prefieren comer fuera de su casa que consumir la cocina tradicional, el infarto se presenta en pacientes de 25 a 60 años, cuando antes de los años 90, se veía únicamente en personas que rebasaban esa edad.
Dio a conocer que el año pasado, de las seis mil consultas en cardiología, la mayoría fue por hipertensión arterial, lo que significa pacientes con mayor riesgo a sufrir un infarto.
Dr. Armando Fernández González, cardiólogo del hospital "Ignacio García Téllez" del IMSS.
Sobre los factores de riesgo, citó la diabetes, el ser fumador, la hipertensión arterial, el sobrepeso y el no realizar ejercicio.
Además, mencionó como factores de riesgo menor, el estrés laboral y el estrés por sí mismo.
Destacó que por lo general 80% de las personas que sufren un infarto al miocardio fallece inmediatamente, mientras que del resto que logra llegar al hospital, un 20% muere. A nivel nacional se registran al año unos 160,000 infartos.
Advirtió que el proceso de la obstrucción de las arterias comienza a muy temprana edad, incluso en la infancia, por lo que los padres deben cuidar la ingesta de grasa y de sal en los pequeños porque afectan todos los sistemas del cuerpo, especialmente el cerebro y el corazón.
—Hay que ser muy estrictos en los hábitos alimenticios de los niños para disminuirles la posibilidad de un infarto.
Manifestó que debido a que en la edad fértil la mujer está protegida por los estrógenos —que evitan que el colesterol cause mas daños al organismo— son los hombres entre 25 y 50 años los que están en mayor riesgo de sufrir un infarto. Esta situación cambia después de los 60, cuando las probabilidades de un infarto son iguales en ambos sexos.
—¿Se puede prevenir un infarto? Sí, la clave de todo está en el control del peso.
Los doctores podemos dar tratamiento médico y sugerir dietas, pero si el paciente no pone de su parte, no se logra nada.
Dijo que desafortunadamente, para mucha gente es normal vivir con sobrepeso y con los problemas de salud que ocasiona; pero no lo es.
Agregó que hay mucha gente que vive con factores de riesgo para un infarto y que no se checa o hace exámenes médicos para saber cómo están en relación a su salud y lo que deben hacer para mejorarla.
Dio a conocer que lo importante para evitar un infarto es no tener sobrepeso.
Al respecto, indicó que en el IMSS hay guías y folletos que permiten a la gente saber cuál es su peso ideal de acuerdo a su edad y su estatura.
—Hay que dejar de fumar y hacer ejercicio. Lo más recomendable es una caminata de unos 30 minutos o de una hora al día. Además de servir como esparcimiento, también ayuda a disminuir el estrés.
Agregó, finalmente, bajar en lo posible el consumo de sal y el realizarse chequeos médicos anuales. L.I.