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A pesar de que la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco concedió por segunda ocasión un subsidio de cien millones de pesos a los permisionarios de transporte urbano para evitar el aumento de las tarifas del servicio, el presidente de la Unión de Camioneros de Yucatán, Raymundo Vargas Cruz señaló que el acuerdo con el gobierno del Estado no los obliga a aguantar con las mismas tarifas el tiempo que dure el apoyo económico.
—Hicimos un pacto, un acuerdo de respetar el subsidio por un tiempo. No sé cuánto; la opción es libre.
Admitió que el subsidio es un paliativo que tomaron las dos partes para no afectar a los usuarios con el aumento que solicitaron los permisionarios —de cobrar tarifas de $4.50 y $8.00 en lugar de los $3.00 y $6.00 vigentes— pero que si la situación lo amerita solicitaran un tercer subsidio o aumentarán las tarifas.
A principios de este mes, Ortega Pacheco anunció el pago de cien millones de pesos durante el último año de su gestión estatal a propietarios de aproximadamente 1,800 unidades de transporte público, a fin de evitar el aumento de tarifas solicitado por los permisionarios. En Septiembre de 2008, la gobernadora concedió un primer apoyo económico de $16. 5 millones a los transportistas de este ramo para evitar también un aumento en el cobro del servicio.
Raymundo Vargas Cruz, presidente de la Unión de Camioneros de Yucatán. Foto de Archivo.
En amable entrevista con Artículo 7, el Sr. Vargas Cruz dijo que el apoyo es insignificante porque representa apenas $0.36 (treinta y seis centavos) por pasajero, es decir, unos 162 pesos diarios por unidad —el número de usuarios asciende a 450 por vehículo. Mientras que en tan sólo 6 meses el combustible aumentó $0.50 por litro.
—Nos sirve de apoyo, pero "no se parece" a los $4.50 y $8.00 que nos sugiere el estudio tarifario.
Mencionó que de los $100 millones que durante un año proporcionará el gobierno del Estado durante un año, mensualmente erogará unos $83,333,333; eso, dividido entre 1,800 unidades, resulta un apoyo mensual de $4,629.63 por cada unidad.
—Entonces, ¿no hay garantía de que aguanten un año con las mismas tarifas?
—No. No queremos subir la tarifa,pero nos obliga el aumento del combustible, entre otras cosas. Hoy leí en la prensa que dijo el Presidente Felipe Calderón que continuará subiendo hasta llegar a $14 en algunos estados. Pero si llega a $14 estamos liquidados. Tendríamos que asaltar bancos para dar el servicio.
—Aguantaremos hasta donde sea posible, pero si no podemos hay dos opciones: un nuevo subsidio o el aumento de las tarifas. L.I.