135 palabras
Mujer,
uno nunca sabe que misterios
escondes tras los párpados,
que pecados ostenta
el santoral de tu piel,
uno nunca sabe los nombres amados
que acaricia el silencio
en tu boca,
que universos se fuman tus manos,
que espejismos nocturnos
te suelen perder.
Mujer,
uno nunca sabe el perímetro
de tus sueños,
ni las razones que hacen
que llueva tu llanto
en tono café.
Uno nunca sabe explicarse:
que estaciones acentúan tus pasos,
que oraciones adquieres a plazos,
que paradojas te exilian,
mujer...