Ante representantes de la cámara de diputados del Congreso de la Unión, académicos y representantes de otros grupos étnicos de México, que participaron en el marco del foro El derecho de los pueblos indígenas al desarrollo, que fue organizado por el Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria, en la lXI legislatura de la cámara de diputados, Bernardo Caamal Itzá, de origen maya, exdirector de la radiodifusora Xenka, La voz del Gran Pueblo, ex director del departamento de desarrollo rural de su pueblo, que desde hace más de quince años ha estado trabajando como comunicador, presentó su conferencia cosmovisión maya y el desarrollo.

Caamal Itzá, al participar, dijo que pareciera que el mundo está en un caos, la crisis ha minado a todos. Se escuchan y se ven en la televisión las crisis que suceden en medio oriente y Europa, incluso movimientos ciudadanos que suceden en los Estados Unidos debido a la crisis financiera.

Participantes en el foro sobre derechos de los pueblos indígenas al desarrollo

Recordó la historia de México: cuando llegaron los mexicas a la gran Tenochtitlán, desde lejanas tierras guiados por sus sueños, con la esperanza de llegar a la tierra prometida; y al llegar construyeron un gran imperio y que cada mañana nos refleja el escudo nacional de la bandera.

Reiteró que éstos años pareciera que estamos en un momento de nuestra historia en que no hay esperanza, y es lo que se debe de fortalecer para que cada quien, desde su familia, diseñe ese futuro que le ha sido negado de manera sistemática a la población, como mayas, yucatecos y como mexicanos.

Destacó que las instituciones que trabajan para el pueblo de México no deben hacer distinciones al momento de alentar su desarrollo, sobre todo para fortalecer los renglones de la sociedad, especialmente el campo, porque es ahí donde se generan los alimentos.

Recalcó que hoy en día muchas instituciones con sus programas, pareciera que sólo destruyen el tejido social y han ocasionado fracturas entre los ciudadanos y han negado oportunidades a quienes las han solicitado. No es el momento de hacerlo, sino se deben es construir y hacer puentes de diálogo para que generen nuevas oportunidades a los que menos tienen, especialmente a los jóvenes, enfatizó.

Reiteró la importancia de escuchar a los jóvenes y a los campesinos y diseñar los programas de las diversas dependencias desde la base social y no imponerlos. Dijo que hay que conocer las leyes para buscar su respaldo al momento de denunciar a los que no cumplen con su función y que las instancias del estado mexicano, como la cámara de diputados, deben cumplir con su papel de conocer exactamente qué pasa con los impuestos de los ciudadanos.

También hizo referencia a los resultados de los foros realizados en la región sur del estado y del estudio regional de la Asociación de Silvicultores del sur de Yucatán. Asimismo, subrayó la necesidad de que se fortalezcan los espacios ciudadanos, como los consejos municipales de desarrollo rural, que son mandatados por la Ley de Desarrollo Rural Sustentable, para que no sean letra muerta, tal y como sucede hoy en día.

Antes de concluir su participación, recordó una de las profecías mayas, impregnada entre lo mítico y el mensaje de esperanza, para un pueblo que sigue construyendo su propio modelo de vida: Llegará el día en que el venado salte y el faisán vuele de nuevo en el mayab... y se preguntó: ¿no será que estamos presenciando su cumplimiento, con el reconocimiento que el mundo le da a nuestra cultura, mismo que la ONU otorga al aprobar una declaración donde se reconocen los derechos de los pueblos indígenas en el mundo?, ¿Será un sueño...?