Los picos más altos se registran entre marzo y mayo

Sus síntomas pueden confundirse con una gripa, lo que hace más fácil el contagio porque la gente no toma precauciones, señala especialista

La llegada de la primavera no sólo traerá el calor, sino también el mayor número de casos de varicela, cuyos picos más altos son en la temporada marzo-mayo, advirtió el Dr. Felipe Alonzo Vázquez, titular de Prestaciones Médicas del Hospital Regional "Ignacio García Téllez" del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Agregó que aunque hay casos de varicela todo el año, se ha observado que en los últimos años el inicio de la primavera es cuando más casos se presentan. Posteriormente, viene un "bajón" en el número de personas contagiadas.

Dio a conocer que la varicela es una enfermedad altamente contagiosa y muy difícil de prevenir, sobre todo en aquellos lugares donde hay gran cantidad de gente, ya que la enfermedad comienza a contagiar antes de que aparezca el exantema o ampollitas.

—Hay un período catarral que dura entre tres y cinco días. Entonces, el paciente desconociendo que tiene varicela, porque piensa que tiene un catarro normal, sigue acudiendo a su centro de trabajo. Posteriormente, empieza a notar que brotan las máculas, luego las pápulas y después las ampollas y ese día, ya no va. Pero el periodo en el que estuvo tratando con otras personas, ya contagió a varias.

Precisó que la varicela es una enfermedad contagiosa ocasionada por el virus varicela-zóster, de la familia de los herpes virus que también es el causante del herpes Zóster. Es una de la enfermedades clásicas de la infancia, que en los niños suele ser leve, pero en adolescentes y adultos tiene mayor riesgo de complicacicaciones. La enfermedad dura alrededor de una semana.

Explicó que el virus causante solo se transmite de persona a persona, ya sea por contacto directo de las lesiones cutáneas o por vía aérea al expulsarse, mediante la tos o los estornudos. El período de incubación hasta que aparece la enfermedad es de dos a tres semanas. Los enfermos son contagiosos aproximadamente dos días antes de aparecer la erupción.

Comentó que el mayor número de casos de varicela en los últimos cinco años registrado en las Unidades Familiares Médicas del IMSS, fue en 2009 con 9,825 casos. Los principales brotes se dieron en guarderías, escuelas y centros de trabajo.

—Se habla de un brote, cuando hay de dos a tres casos dentro de un mismo salón, por ejemplo en guarderías. Entonces, inmediatamente acude gente nuestra: epidemiólogos y enfermeras sanitaristas a bloquear todas las situaciones de contagio que puedan haber. Además, tratamos a todos los niños que pudieran estar vulnerables o que no se han enfermado nunca de varicela. Por supuesto, aislamos al enfermo y evitamos todos los juguetes que puedan ser de transmición .

La varicela es altamente contagiosa, pero tampoco es obligatorio que si estuviste con alguien que la tenga, te vaya a dar. Depende también del sistema inmunitario de cada persona. Si es el adecuado, puede ser que la persona no se contagie.

Destacó que los familiares de aquellos que contraen la enfermedad a partir de otro miembro de la familia, suelen presentar formas más graves de varicela que los primeros casos, probablemente por un contacto más intenso y continuado con el virus. La varicela es muy contagiosa, así que cuando hay un enfermo en casa, de 80% a 90% de las personas susceptibles que viven ahí, terminan contrayendo la enfermedad.

En cuanto a los signos de la enfermedad, dijo que el más característico de la varicela es una erupción en la piel que aparece en forma de pequeños granos que en poco tiempo se convierten en vesículas (ampollas llenas de líquido). Suelen aparecer por el tronco, la cara y el cuero cabelludo, extendiéndose después por todo el cuerpo. También puede afectar la boca, la vulva y el interior de los canales auditivos. Uno o dos días después, las vesículas se transforman en costras. Las lesiones en la piel ocasionan mucha picazón y escozor. Al aparecer las costras, las lesiones no serán contagiosas.

Señaló que antes de que aparezca la erupción, suelen presentarse otros síntomas, como fiebre, dolor de cabeza, malestar general, pérdida de apetito o vómitos; y suelen perdurar los primeros días de la enfermedad.

A una pregunta, indicó que quien ya tuvo la enfermedad, no la vuelve a padecer, porque los anticuerpos se mantienen constantemente en la sangre, y al estar nuevamente en contacto con el virus, les permite estar inmunes.

Sin embargo, añadió, que el herpes Zóster, conocido como segunda varicela, sí puede darles a quienes ya tuvieron esa enfermedad.

Manifestó que el virus de la varicela tiene diferentes serotipos, como el zóster (herpes zóster), que es de la misma familia de la varicela. Cuano se presenta, lo hace en forma de una varicela localizada, es decir, una complicación delimitada en alguna parte del cuerpo, sobre todo, con mucha afinidad al sistema nervioso. Muy frecuente en cara, por el nervio trigénico, que pasa alrededor de la cara, y muy común en la zona intercostal —entre las costillas— donde comunmente se encuentra este tipo de problemas. Este último tipo se maneja de manera diferente, porque requiere un tratamiento especial con anti virales, ya sea tomados o en crema, y a veces se requiere de una vitamina, la B12, para fortalecer el sistema nervioso.

—En el herpes Zóster se requiere atención médica, porque al estar muy afín al nervio, el paciente tiene dolor, porque es una zona muy dolorosa, y tiene molestias con el roce de la ropa. Entonces, la mayoría de las veces acude al médico por el dolor, pero no es contagiosa como la varicela.

Aclaró que cuando aparece el herpes Zóster, es porque la persona cursa por algún tipo de inmuno depresor, como el estrés, el ejercicio físico intenso, no dormir adecuadamente o el no comer bien. Todos estos tipos de situaciones bajan las defensas del sistema inmunológico, que es lo que aprovecha el virus para aparecer. Si contrarrestamos esos factores condicionantes, es difícil que no se pueda presentar.

Finlamente, dio a conocer que el IMSS cuenta con la vacuna antivaricela, pero no se aplica a la población en general; ya que esta dosis especial está reservada para pacientes, especificamente niños inmunodeprimidos con leucemia, cáncer, insuficiencia renal o cualquier patología que les baje sus defensas. Su aplicación los protege de otro tipo de complicaciones. L.I.