309 palabras
15 de marzo.- A decir verdad, era perra.
Su dueña anunció la muerte de su mascota, que tenía 15 años.
Yoda -como se llamaba la perrita- era una mezcla de Crestado Chino con Chihuahua.
Y el animal saltó a la fama el año pasado cuando ganó un concurso internacional de perros feos, celebrado en California.
La perra era tan poco agraciada que cuando Terry Schumacher la vio por primera vez pensó que era una rata.
La primera vez que su dueña vio a Yoda pensó que era una rata.
Pero su apariencia le permitió ganar los mil dólares de premio del certamen "El perro más feo del mundo", en junio pasado.
Yoda tenía unos cuantos mechones de pelo, una lengua saliente y piernas delgadas y lampiñas.
El concurso del perro más feo se celebra cada año en Petaluma, California. Sam, un crestado chino, fue tricampeón. Falleció en 2005.
Pesaba sólo 800 gramos y fue encontrada por Schumacher cuando estaba abandonada en la calle.
Pero después del concurso apareció varias veces en televisión, incluyendo en un programa de cambio de apariencia.
Yoda murió el sábado mientras dormía.
Su dueña dijo que extrañará "sus divertidas costumbres", pero dijo consolarse sabiendo "que se reunió con mi mamá y mi papá, quienes siempre la quisieron mucho".
"En mi recuerdo vivirá para siempre", declaró Schumacher.