Wing 7 es una nueva forma de generar energía limpia a través de los fuertes vientos que se registran en las alturas, a las cuales las turbinas eólicas convencionales no llegan.

Luego de tomar vuelo como una avioneta, la máquina puede ascender hasta 400 metros y volar de manera autónoma. Aprovechando los vientos de 35 km/h que corren a esas alturas, genera casi 20 kilowatts de energía.

La turbina eólica voladora, desarrollada por Makani Power, está construida con fibra de carbón (pesa 58.4 kg) y mide 8 metros desde la punta de un ala a la otra. Remonta el vuelo de manera vertical, y cuando alcanza cierta altura sus motores se encienden para que el mecanismo se desplace en forma horizontal, realizando círculos, propicios para recolectar mayor energía a través de los rotores, que funcionan como las hélices de una turbina. La energía generada es transmitida a través de un cable hacia su almacenamiento en tierra.

El prototipo fue creado como una fuente de energía eólica sin periodos de poca efectividad por la falta de vientos fuertes. Aunque, en comparación con las turbinas terrestres fijas o flotantes, requiere su lanzamiento diario, resulta una propuesta menos costosa dentro de la incipiente industria de las energías alternativas. El siguiente proyecto es desarrollar una turbina de 1 megawatt operando a 550 metros de altura, la cual podría ser realidad en 2015