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La idea de que los yucatecos son bajos de estatura por cuestiones genéticas es falsa; se ha demostrado que cuando los países y grupos étnicos son inestables en términos de educación, economía y contexto social, las estaturas son generalmente bajas; cuando las condiciones de vida son mejores, la altura de sus habitantes es mucho mayor. Así lo dio a conocer la Dra. María Inés Varela-Silva, conferencista en Biología Humana y presidenta de la Sociedad Biosocial.
Agregó que el caso de Portugal, de donde es originaria, es similar al de Yucatán: los portugueseses son los más bajos en toda Europa. Pero desde que el país tuvo una revolución y se mejoró el ambiente y las condiciones políticas y económicas, así como disminuyeron las enfermedades infecto- contagiosas, la población está alcanzando una altura mayor.
—Los estudios demuestran que cuando las condiciones de vida mejoran, la altura de la población aumenta y la estatura es un buen indicador de la salud de una población; las personas altas tienen menos enfermedades.
Como ejemplo, citó que los migrantes mayas que viven en algunas comunidades de Estados Unidos, como Indiantown, en Florida, alcanzan una mayor altura, demostrando que el crecimiento no tiene que ver con la genética, sino con el medio ambiente. Los hijos de esto, crecieron 10 centímetros en unos tres años, a pesar de seguir ingiriendo comida chatarra.
Al respecto, la especialista que también forma parte del Centro para la Salud Global y Desarrollo Humano en el Reino Unido, explicó que se debe a que probablemente en Estados Unidos tienen mejores condiciones de vida, mejores servicios sanitarios y más acceso a alimentos fortificados, como leche con vitaminas A y D, harinas, ácido fólico, sal yodata; y micronutrientes que van a ayudar al crecimiento, a pesar de que siguen comiendo chatarra. Además, tienen otras ventajas, como agua sin floruro, que ayuda a tener dientes más sanos; beben más leche y tienen menos enfermedades diarreicas.
Entrevistada al término de la presentación de los resultados de su estudio denominado "El estado de salud y crecimiento de los mayas", efectuada en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (CINVESTAV), señaló que desde 2005 ha trabajado con el CINVESTAV, teniendo una colaboración muy productiva. Los grupos de estudio se encuentran en colonias del Sur de Mérida, descendientes de mayas en comunidades de Los Angeles e Indiantown, Florida; y habitantes de Guatemala.
Dra. María Inés Varela-Silva, presidenta de la Sociedad Biosocial y e integrante del Centro para la Salud Global y el Desarrollo Humano en Inglaterra .
Mencionó que también la investigación ha recibido financiamiento para el proyecto de Wenner Gren Foundation de Nueva York y que la idea es continuar trabajando para entender mejor los aspectos de salud de los mayas en el sur de Mérida y encontrar estrategias para acrecentar su salud en general. En el proyecto se está haciendo hincapié en el trabajo con las madres de familia, para darles más información de nutrición y ejercicio para los niños y pensando que las condiciones de vida mejoren para las futuras generaciones.
—Durante toda esta investigación hemos visto que la mujer, especialmente la madre, juega un papel muy importante en la altura que alcance su hijo. Si la madre tiene una altura menor a 1.50 metros, el hijo tiene tres veces más posibilidades de ser bajo. Asimismo, los niños que nacen con menos de 3 kilos de peso, alcanzarán menos de 1.50 metros cuando crezcan.
Por este motivo, estamos buscando más financiamiento para hacer intervención en colonias y promover una mejor alimentación, especialmente en las niñas, que en un futuro serán madres. Mientras eso sucede, entrenaremos gente local para que nos ayude y regresaremos en verano.
Agregó que se están desarrollando pequeños "anuncios" para las mamás, a fin de enseñarles qué alimentos deben dar a sus hijos y lo que ellas deben comer para estar más saludables, especialmente, porque hay familias que tienen árboles frutales en sus patios y no los usan.
—Hay madres de familia que prefieren darles refrescos embotellados a sus hijos en lugar de un jugo de frutas. Hemos visto que cuando a los niños les ofreces manzanas o naranjas, las aceptan gustosos y por eso estamos pidiéndoles a las mamás que se los den. No se trata de que compren fruta porque sabemos que es cara, pero si que usen lo que tienen en sus patios.
Destacó que para mejorar el nivel de alimentación en los niños el papel de las abuelas es fundamental, porque el estudio ha demostrado que los niños que las tienen cerca, están en mejores condiciones nutricionales, porque la abuela tiene un conocimiento más tradicional y normalmente usan las frutas del patio. Así que, la unión familiar entre niño, la mamá y la abuela es muy importante.
Explicó que aunque el ambiente social y económico es el que determina la estatura de los niños, el estudio demostró que gran parte de las personas estudiadas resultó con lo que se denomina como "doble carga", es decir, tiene una desnutrición crónica y al mismo tiempo presenta obesidad.
Las condiciones sociales, educativas y económicas son determinantes en la altura de los yucatecos, no la genética como se creía, afirmó la especialista.
—Aunque parezca paradójico, la desnutrición se da porque hay falta de nutrientes esenciales en la alimentación y hay enfermedades diarréicas, pero al mismo tiempo, consumen muchas comidas de paquetes que tienen mucha grasa, que no son nutritivas, lo que es esencial para el crecimiento. Entonces, aumento en grasa, pero no en estatura porque no hay nutrientes, como por ejemplo yodo y zinc.
Si a eso le agregas que el organismo de las personas de países en desarrollo está programado para almacenar grasa para tiempos de escasez y que no hay mucha actividad física, la situación se complica. Además, se dice que la desnutrición crónica es irreversible después de los tres o cuatro años, así que todos los esfuerzos están encaminados a mejorar en cuanto se pueda el nivel nutricional de los niños.
Finalmente, dijo que diversos estudios también demuestran que la población de países desarrollados es más alta, pero obesa; mientras que la de países en desarrollo son muy bajos y obesos. La investigación ha demostrado que los migrantes mayas que viven en Estados Unidos son más altos que sus compatriotas que viven en sus países de origen, pero también son obesos en su mayoría. L.I.