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Mérida, Yucatán, 28 de mayo de 2012.- Recibimos de la oficina de prensa del candidato panista al gobierno del Estado, Joaquín Díaz Mena, el siguiente boletín de sus propuestas para el abatimiento de la pobreza en la Entidad, que presentara el día de hoy en conferencia de prensa:
Uno de los problemas estructurales que padece Yucatán es el de la pobreza.
Según un estudio reciente del Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (Coneval), Yucatán ocupa el cuarto lugar con mayor pobreza en el país, sólo detrás del Estado de México, Veracruz y Jalisco.
De lo avanzado hasta 2007 en el combate a este problema, que nos ubicaba ya en el noveno lugar, Yucatán regresó nuevamente al 4o. lugar, el mismo que tenía en 2001. Un dato revelador que muestra otro grave retroceso en lo que va de este gobierno.
El mismo informe del Coneval revela que de 2008 a 2010, en sólo dos años, 50 mil yucatecos más cayeron en la pobreza y se sumaron a casi la mitad de la población que ya estaba en esas condiciones.
Pero lo más grave, es que de esos 50 mil, 35 mil entraron al grupo en pobreza extrema, que son los "más pobres de los pobres". Eso significa que uno de cada diez habitantes de nuestra entidad no cuenta con lo mínimo indispensable para subsistir.
Otro indicador que refleja la gravedad del problema es que hay 418 mil yucatecos que padecen pobreza alimentaria; es decir, que tienen ingresos insuficientes para garantizar su comida día a día. Esa cifra representa el 21% de la población del Estado y para nadie es un secreto que los más afectados son nuestros hermanos mayas de las comunidades altamente marginadas.
La pobreza se ha disparado de nuevo, como estigma del actual gobierno que ha derrochado más de 140 mil millones de pesos en lo que va de esta administración.
Frente al hambre que padecen miles de yucatecos, el grupo en el poder se ha dedicado al despilfarro, el saqueo, la corrupción, el gasto en el culto a la personalidad, viajes, fiestas, pasarelas y mega jaranas. ¡Han dejado a los pobres en el abandono!
No hay la menor duda de que Yucatán está viviendo malos días
Como se establece en nuestra línea estratégica de Combate a las desigualdades, la reducción de la pobreza será la prioridad número uno que tendremos en mi gobierno.
A diferencia de quienes que han mentido al ofrecer que erradicarían la pobreza extrema en Yucatán o en Mérida, nuestra propuestas es seria y viable.
Para afrontar ese reto, presentamos hoy las líneas generales en ese rubro de nuestra Propuesta de Combate a la Desigualdad, que incluye entre otras, las siguientes acciones:
1.- Poner en marcha el Programa Estatal de Combate a la Pobreza Alimentaria. Lo más urgente es que las familias tengan los medios para proveerse de alimentos, a través de fuentes alternativas de ingresos, la producción de auto consumo y la educación alimentaria.
2.- Generación de empleos. Una opción que arroja resultados más rápidos y directos para llevar ingresos a las comunidades es el impulso al Turismo, que no requiere de grandes inversiones en el medio rural.
Promoveremos el ecoturismo, el turismo de aventura y el turismo cultural; Yucatán es rico en bellezas naturales, arqueológicas y en cultura viva, hay que organizar a las comunidades y apoyarlas con la dotación de servicios básicos para recibir a los visitantes.
Hay experiencias probadas de éxito en proyectos de ecoturismo que apoya la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, como el caso del parador turístico de Yokdzonot, municipio de Yaxcabá, dirigido por mujeres, otro ejemplo está en San Antonio Mulix del municipio de Umán con servicios de cabañas, comedor y acceso a cenotes.
Impulsaremos nuevos corredores turísticos en las diferentes regiones del Estado, con base en proyectos comunitarios para que la derrama económica beneficie a las comunidades, como ocurre en la ruta de los cenotes de Cuzamá, Homún y Hocabá.
3.- Facilitar la inversión local, nacional y extranjera.
4.- Reactivar el campo yucateco.
5.- Educación alimentaria. El cambio de hábitos de consumo ha hecho que se dejen en el olvido alimentos que están al alcance de las familias, particularmente del medio rural. Un ejemplo es el consumo de la chaya que tiene un alto valor nutritivo, similar a la carne y con la ventaja de que no tiene colesterol ni ácidos grasos. Es un alimento sano y nutritivo.
6.- Atención a grupos vulnerables.