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Mérida, Yucatán, 19 de octubre de 2010.- Especialistas en pediatría del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Yucatán señalaron que la desnutrición infantil es curable a través de una adecuada intervención y vigilancia nutricional; no obstante advirtieron que en la edad adulta puede originar diversas secuelas.
Las principales consecuencias que llegan a presentarse están relacionadas con problemas para memorizar, falta de concentración, dificultades de aprendizaje o incluso deficiencias en la vista, derivados de una baja en el consumo de vitamina A.
La desnutrición se define como un estado patológico provocado por la falta de aporte, ingesta o absorción de alimentos, o por un exceso en el gasto de calorías. La primera se clasifica como primaria y la segunda como secundaria.
Enfermedades de origen cardíaco, padecimientos tumorales o problemas intestinales, entre otras, pueden ser causa de desnutrición secundaria.
El sector más afectado es el de los menores en etapa de lactancia. El IMSS Yucatán cuenta entre sus derechohabientes, con 69 mil 350 menores entre cero y cuatro años de edad.
Los especialistas del Seguro Social toman en cuenta diversos criterios para establecer un diagnóstico de desnutrición, tales como los resultados de estudios de albúmina, que se practican para vigilar niveles de proteínas en la sangre y baja de glóbulos, las mediciones de peso y talla, y algunos marcadores como la textura de piel y cabello.
El IMSS cuenta con servicio de nutrición a partir del primer nivel de atención, es decir, en las Unidades de Medicina Familiar (UMF), por lo que el Seguro Social recomienda a los padres de familia llevar a sus hijos con su médico familiar para verificación de talla, peso y crecimiento. En niños recién nacidos se recomiendan mediciones cada mes, dos meses, cuatro meses, seis meses, nueve meses y al año. A partir de los dos años de edad pueden realizarse anualmente.
Los pediatras del IMSS señalaron que además de las secuelas neurológicas, psicoconductuales y visuales, entre otras, que la desnutrición puede generar, existen otros riesgos como el hecho que el menor o la persona desnutrida se encuentra más vulnerable a padecer infecciones severas, debido a que en general su sistema inmunológico se encuentra afectado.
"Una infección incluso puede llevar a la muerte a la persona en desnutrición, al no contar con defensas para hacer frente al cuadro que presenta", advirtieron los especialistas. Boletín de la delegación del IMSS en Yucatán.