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Vivero de ramón
Con una inversión cercana a los cuatro millones de pesos, el rancho agrícola y forestal El Ramonal Maya, demostró que el campo yucateco puede ser redituable, sin necesidad de apoyos gubernamentales.
El Lic. Manuel Mendoza Cauich, promotor de esa idea, anunció que el proyecto consiste en la plantación de treinta mil matas de ramón, la primera de su tipo a nivel mundial, en una superficie de 24 hectáreas, en la comisaría de Baca.
El empresario explicó los motivos para sembrar esta especie:
Manuel Mendoza muestra una mata de ramón a Pedro Cabrera
La finalidad de esta siembra es la conservación del medio ambiente, dada la intensidad de lo que se planea plantar, lo frondoso de ese árbol y su capacidad para producir gran cantidad de oxígeno. Además evitará la erosión de la tierra y traerá gran cantidad de lluvia a la zona.
La producción y cosecha de su fruto es redituable porque es apta para el consumo humano y la elaboración de diversos productos, como son las harinas con sabor a chocolate, café y pan sin ningún aditamento adicional, entre otros. Es un producto totalmente orgánico porque no se utilizarán químicos en las plantas.
También produce forraje para ganado, carneros, aves de corral y otros animales.
El árbol de ramón tiene un período de vida de 150 a 180 años, aunque se han encontrado árboles de hasta 300 años. Su madera no es muy apreciada pero a partir del quinto año, su producción de fruto y follaje es más redituable que su corte para madera.
Mendoza Cauich presentó su inédito cultivo al presidente de la Fundación Produce Yucatán, Pedro Cabrera Quijano, y puso a disposición de esta asociación civil su proyecto, para que sirva como modelo de producción alternativa para los campesinos yucatecos.
Lo ponemos a disposición de ustedes sin costo alguno para que el quiera aprender a cultivar ramón, indicó.
Mostró el sistema de riego por goteo controlado, un sistema que apoya el crecimiento de las plantas.
Esperamos realizar cortes de follaje a partir del tercer año de la planta, mediante un sistema de poda que se realizará dos veces al año. La primera poda será en los meses comprendidos entre marzo y abril. La segunda, en julio y agosto, cuando únicamente se podará la mitad de la planta, para ayudarla a que aumente su follaje. A partir del cuarto año, realizaremos podas en las copas, para evitar que la planta se eleve más de seis metros.
Calculamos producir por cada árbol, entre 100 y 150 kilos de follaje y entre 20 y 40 kilos de frutos anuales, a partir del cuarto año, recalcó.
Destacó que ese proyecto, único de su tipo a nivel mundial, no ha recibido apoyos gubernamentales pese a que funcionarios de los distintos niveles ofrecieron apoyarlo en este sueño de locura, que genera 20 empleos directos.
Cabrera Quijano felicitó al empresario por su proyecto y ofreció proponer la siembra de ramones en el nuevo modelo de ganadería del futuro que impulsa a nivel nacional el secretario de Agricultura, Francisco Mayorga Castañeda, que se basa en un modelo que desarrollaron investigadores yucatecos.