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En el cuadro 9, "Gasto Ejercido por Ramo en 2010", del Informe trimestral sobre las finanzas públicas del Estado de Yucatán correspondiente al 4º trimestre del 2010, se puede apreciar que el despacho de la C. Gobernadora ejerció durante dicho año la jugosa cantidad de 225.7 millones de pesos. Ese monto así solito pudiera no decirnos mucho, pero si lo comparamos con lo ejercido por dicho "ramo" en años anteriores —como en el 2007 donde ejerció $12.4 millones, lo que equivale a 18 veces menos— o con lo ejercido por otras "ramos" o dependencias ese mismo año —como la Procuraduría General de Justicia del Estado que erogó durante el 2010 "únicamente" $215.7 millones— está claramente fuera de toda proporción o lógica financiera y es una muestra irrefutable del dispendio y derroche que caracteriza a este gobierno, realizada en este caso por el área que, irónicamente, debiera ser ejemplo de disciplina y austeridad presupuestal para todas las demás. Transforman, crecen y encarecen el Despacho
Como se observa, el gasto del Despacho del Gobernador se disparó a partir del 2008 hasta llegar a más de 225 millones de pesos el año pasado, más de 18 veces lo gastado en dicha área el último año de gobierno de Patricio Patrón Laviada.
Como puede apreciarse en la gráfica "Gasto total ejercido por el Despacho del Gobernador", del 2002 al 2007 el presupuesto ejercido anualmente por la oficina del titular del Ejecutivo —en ese entonces encabezado por Patricio Patrón Laviada— promedió $11.1 millones. Hasta esa fecha esta dependencia del "sector centralizado" incluía básicamente al propio gobernador, sus secretarías particular y privada, la secretaría técnica, la dirección administrativa, el área de atención ciudadana y una pequeña oficina de comunicación social que coordinaba el trabajo de todas las oficinas de comunicación de las dependencias estatales. El personal total del área no sobrepasaba de unas cuantas decenas de servidores públicos, entre secretarias, auxiliares, algunos jefes de departamento y directores, un subsecretario (el secretario técnico) y el gobernador.
La organización, logística y seguridad de los eventos y giras del gobernador eran tarea de tres o cuatro personas del Despacho que se apoyaban en la Dirección de Operaciones y Servicios (DOSE) de la Oficialía Mayor y en personal de la Procuraduría General de Justicia o de la Secretaría de Protección y Vialidad comisionado al servicio de escolta del gobernador.
Con esa estructura, prácticamente la mitad del recurso ejercido entre el 2002 y el 2007 en el Despacho del Gobernador se destinaba a los sueldos del personal, mientras que el resto se usaba en otras partidas de Capítulo 1000 (Servicios Personales) como Cuotas de seguridad social y Compensación garantizada, así como en otras partidas diversas como Servicio telefónico, Energía eléctrica, Combustibles, Pasajes, Viáticos y Alimentación de personas. Ninguna de ellas, sin embargo, llegaba a importar cantidades proporcionalmente relevantes como para reseñarlas individualmente en la gráfica Gasto ejercido por partida en el Despacho del Gobernador.
Durante el sexenio pasado, la partida de sueldos significaba prácticamente el 50% del total ejercido en el Despacho del Gobernador. Una vez iniciado el gobierno de Ivonne Ortega, además de los sueldos, otras partidas como los gastos de ceremonial y orden social, las asesorías, el combustible y los arrendamientos dispararon el presupuesto ejercido de la dependencia hasta superar el de varias otras como la Procuraduría del Estado o la Consejería Jurídica. Cabe mencionar que la aparente disminución en ciertas partidas entre el 2009 y el 2010, responde a que los datos de los que se dispone para este último año corresponden a noviembre y, por tanto, es esperable aumenten al incorporarse las cifras de diciembre.
Sin embargo, a partir del 2008 es otra historia. El Despacho de la ahora Gobernadora empieza a crecer en áreas y estructura y con ellas los presupuestos autorizados pero sobre todo los ejercidos cada año. Además de las secretarías particular y privada que incrementaron su personal "operativo", la secretaría técnica pasó de ser una oficina de tres personas —el secretario técnico, una secretaria y un asistente— a una influyente estructura encabezada por el Mtro. Ulises Carrillo y que se compone además de la dirección de administración, de sendas unidades de proyectos especiales y de análisis y seguimiento, respectivamente. La oficina de atención ciudadana cambió de nombre a "Gestión ciudadana" y con ella su responsable pasó de ser director, como el sexenio pasado, a secretario —con más del doble del sueldo— y de tener dos o tres asistentes, a contar con una estructura holgada de personal con 5 mandos medios que le reportan.
Asimismo, se crearon la COMEY con una estructura de dos departamentos que le reportan a su titular José Luis Blanco Pajón y la poderosa Secretaría de Logística y Protocolo a cargo de Jorge Canul Rubio, con una dirección —la de Operación, Mantenimiento y Eventos, "DOME", que aparentemente corresponde a la otrora "DOSE" que formaba parte de la Oficialía Mayor— y 8 departamentos que le reportan. Cabe mencionar que aunque pudiera pensarse que la "DOME" ahora cubierta presupuestalmente por el Despacho de la Gobernadora le ahorró recursos a la Oficialía Mayor, esto no es así, toda vez que dicha dependencia no sólo no decrementó su presupuesto ejercido entre el 2007 y el 2008 sino que lo aumentó al pasar de $87.3 a $128.8 millones y lo siguió aumentando los años subsecuentes —$233 millones en 2009 y $306.6 en 2010.
Por el contrario, la otrora pequeña área de comunicación social que coordinaba todas las oficinas de comunicación de las secretarías desde el Despacho del Gobernador, fue independizada de dicha dependencia y se convirtió en una secretaría que, como ya hemos visto en numerosos reportajes anteriores, ejerce millonarias cantidades de recursos anualmente.
En total, según el Directorio del Gobierno del Estado, son 30 funcionarios de mandos medios y superiores los que se desempeñan actualmente en el Despacho de la Gobernadora y con ellos colaboran varias decenas de servidores públicos con jerarquías menores.
Como ya se señaló y puede apreciarse visualmente en la gráfica de Gasto ejercido por partida, este importante crecimiento del aparato burocrático del Despacho de la Gobernadora se tradujo no sólo en el incremento de la partida de sueldos, que pasó de poco menos de $6 millones en el 2007 a $33.6 a noviembre del 2010, sino también en el aumento de otras partidas como Gastos de ceremonial y orden social —en donde se registran los gastos por los numerosos eventos como los informes ciudadanos—, que aumentó más de 40 veces al pasar de $0.5 millones en el 2007 a $21 millones al 2010; combustibles, que se incrementó de $0.3 millones en el 2007 a $2.2 en el 2010 y Arrendamiento de vehículos, que de no ejercer nada en años anteriores, terminó significando $2.2 millones en el 2010 por todos los vehículos asignados a los mandos medios y superiores adscritos al área.
Otras partidas como las de Asesorías y Arrendamiento de maquinaria también aumentaron de forma escandalosa después de prácticamente no haberse usado durante todo el sexenio pasado. Para el primer caso, la explicación de los casi $17 millones ejercidos hasta noviembre del 2010 es el llamado "Cuarto de Guerra" de la gobernadora, integrado por un número cada vez mayor de asesores que cobran jugosas igualas por sus "asesorías" y "consejos". Por lo que toca a la renta de maquinaria, se desconoce a qué se hayan destinado los $10.6 millones erogados el año pasado, aunque presumiblemente fueron por maquinaria rentada por la Comey para alguna obra.
En resumen, como se puede ver en la gráfica de Gasto total ejercido, después de seis años de crecimiento lógico y racional del presupuesto ejercido por el Despacho del Gobernador, entre el 2007 y el 2010 el mismo empieza a aumentar cada año un promedio de $70 millones, importe fuera de toda lógica y razón toda vez que, con excepción de la Comey, las actividades de la dependencia —básicamente puro gasto corriente— no variaron significativamente entre un año y otro y, por tanto, salvo el crecimiento inflacionario y algunos otros incrementos por nuevas acciones emprendidas por la Comisión Metropolitana, los presupuestos ejercidos esos años no debieron ser muy diferentes unos de otros.
Durante el sexenio pasado el Despacho del Gobernador se sujetó estrictamente al presupuesto autorizado por el Congreso del Estado y hasta obtuvo "economías presupuestales". A partir de la actual administración estatal, el gasto de esa oficina ha rebasado, cada vez más, el presupuesto que le asignaron los señores diputados.
Como la gráfica Comparativo de presupuesto ejercido y autorizado enseña, durante los seis años de la administración pasada, el presupuesto ejercido por el Despacho del Gobernador fue siempre inferior al presupuesto autorizado por el Congreso del Estado, como dicta una correcta disciplina presupuestal. Al ejercer prácticamente puro gasto corriente esta dependencia, esta situación no constituye un "subejercicio" sino una "economía presupuestal" obtenida por los esfuerzos realizados para el ahorro y racionalización de los recursos.
Por el contrario, a partir del 2008, el Despacho de la Gobernadora ha rebasado cado año en mayor cuantía y proporción el techo presupuestal asignado por los señores diputados: $26.3 millones que reprsentan un 51% en 2008, $82 millones que equivalen al 125% en 2009 y $149.8 millones equivalentes al 197% en 2010. Estos gastos no autorizados por el Congreso fueron fondeados con ampliaciones presupuestales provenientes principalmente de excedentes petroleros y que, teóricamente, debieran destinarse a inversión productiva y no a gasto corriente.
Así las cosas, el criminal dispendio, la caprichosa improvisación y la falta de disciplina presupuestal, de correcta presupuestación y de una adecuada planeación financiera de la oficina de la titular del Ejecutivo estatal, son solventados con dinero federal proveniente de un recurso no renovable que, una vez agotado, no se habrá traducido en nada de beneficio real para la población, lo que constituye un doble crimen.
Como ya se dijo anteriormente, durante el 2010 el Despacho de la Gobernadora ejerció un presupuesto de $225.7 millones. Este importe supera al monto ejercido en el mismo periodo por otras diez importantes dependencias del sector centralizado con estructuras operativas mucho mayores y/o funciones con igual o mayor relevancia y trascendencia que las desempeñadas por la oficina de la titular del Ejectivo, entre las que sobresalen la Secretaría de Política Comunitaria y Social (sin considerar el DIF), que ejerció $191.5 millones; la Secretaría de Fomento Económico, que gastó $132.8 millones considerando inclusive el SIFIDEY y al INICC; la Secretaría de Hacienda, que erogó durante el 2010 $161.5 millones; la Secretaría de Desarrollo Urbano, que para proteger la ecología y el medio ambiente sólo desembolsó $71.8 millones y, sobre todo, la Procuraduría General de Justicia del Estado, que con todo y sus más de mil empleados y sus importantes funciones sustantivas (ministerio público, policía judicial, servicios periciales y servicios médico y químico forenses) ejerció un presupuesto que no llegó a $216 millones. Ver gráfica Gasto ejercido por ramo en 2010.
Como puede verse, fueron muchas las dependencias centralizadas y poderes y organismos autónomos que fueron superadas por el Despacho de la Gobernadora en su presupuesto ejercido durante el 2010. El caso más preocupante quizá lo constituye el de la Procuraduría General de Justicia del Estado, que con todas sus funciones sustantivas ejerció $10 millones menos que la oficina de la titular del Ejecutivo.
Paradójicamente, la dependencia de las centralizadas que le siguió en presupuesto ejercido al Despacho de la Gobernadora durante el 2010, fue la Coordinación General de Comunicación Social, la cual, habiéndose escindido de la estructura de esa dependencia, ahora ejerce más que aquélla: $228.7 millones gastó este año principalmente en difusión y publicidad.
De los poderes y organismos autónomos, el Despacho de la Gobernadora ejerció más de quince veces lo ejercido por el INAIP ($14.5 millones); catorce veces lo erogado por el Tribunal Electoral del Estado ($15.6 millones); casi diez veces el presupuesto ejercido por la CODHEY ($23.6 millones); casi el doble del Poder Legislativo ($120 millones) y más del 52% del presupuesto utilizado por el IPEPAC con todo y las elecciones del año pasado ($148 millones). JECM