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Qué bueno que hayan traído hoy las semillas de maíz, calabazas y frijoles, dijo en lengua maya uno de los campesinos al momento de estar con los otros productores de semillas criollas, quienes participaron en días pasados en Peto, en el marco de la feria ambiental comunitaria. Niños y jóvenes unidos al medio ambiente".
Ahora solo estamos esperando que caigan las primeras lluvias para poder hacer nuestras siembras, dijo otro de los productores participantes. Claro, quien no conoce el manejo de las milpas, piensa que basta con las primeras lluvias y a sembrar las semillas, pero el sol que hizo, ocasionó la sequedad del suelo. La verdad, si es un suelo recién preparado tipo ch'akbeen (milpa nueva) la tierra no se moja rápido a diferencia de las milpas hechas de las cañadas, coincidieron otros labriegos.
Mientras eso sucedía en esa mañana, los primeros rayos del sol caían inclementes en la plaza principal, sin embargo, la gente continuaba arribando para participar en este evento comunitario organizado por asociaciones civiles de inmigrantes, la Asociación Regional de Silvicultores U Kanaantaal Sijnal, A.C., la Fundación Produce Yucatán, el Programa de Manejo de Riesgos de Desastres en el Sureste de México, la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), el Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya (INDEMAYA) y el H. Ayuntamiento de Peto.
A poco más de 35 kilómetros de este lugar, en Cisteil, antigua comunidad maya que pertenece hoy a la demarcación municipal de Yaxcaba, en donde la historia ilustra de que fue el lugar donde Jacinto de los Santos Canek, inició las primeras sublevaciones mayas, 38 jóvenes mayas, iniciaron con la carrera ciclística U káaxanil kuxtal (Buscando las razones para vivir).
Manuel Castillo, uno de los catedráticos de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), fue quien bosquejó brevemente los antecedentes históricos de Canek e ilustró los antiguos movimientos sociales de los mayas de Yucatán: Es claro, que todos debemos conocer nuestra historia para diseñar nuestro futuro. Quien no conoce su pasado está condenado a repetirla, recalcó el catedrático de la UADY.
Recapituló la necesidad de conocer los recursos que se tienen para saber apreciarla, y subrayó que hay que platicar con los abuelos, ellos tienen el pleno conocimiento de lo que significa vivir en el mayab.
Los mayas, no sólo fueron los creadores del cero, sino que conocían a la perfección su territorio y sabían que una forma de desarrollar sus modelos de desarrollo y sobrevivencia en estos lugares, eso significa que tenían clara la necesidad de estar organizados, señaló enérgicamente el investigador.
Después de esta semblanza histórica, uno de los jóvenes de Cisteil, entonó el himno nacional mexicano, y después todos guardaron un minuto de silencio en memoria de quienes han luchado por mantener viva la cultura maya.
Lorena Ávila Euán, alcaldesa de Yaxcabá, fue quien dio el banderazo de salida de los jóvenes ciclistas, y la meta fue el centro principal de Peto.
Ninguno de los jóvenes desistió de llegar a la meta, aunque no hayan ganado los honores de ser el primero o el tercer lugar. Lo cierto fue que cada deportista fue recibido con aplausos por su pueblo.
Numerosas petuleños estuvieron atentos a este evento comunitario, mientras eso sucedía, en la radio XEPET "La Voz de los Mayas" se transmitió el programa especial "Biix Kpaktik Kuxtal Ichil le Klu´uma´ -Como miramos nuestra vida en esta región- patrocinado por el Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMYC) en su emisión 2009.
El programa radial destacó el tema del medio ambiente y fue producto de los foros campesinos realizado en Peto, Ichmul (Chikindzonot), Tahdziu, Tixméhuac, entre otras comunidades mayas sureñas de Yucatán y fue recopilado por la Asociación Regional de Silvicultores, este mismo material en su formato video, fue presentado ante más de 3000 petuleños esa misma noche en este evento comunitario.
Queda claro, que las selvas y montes no sólo nos proveen para satisfacer nuestras múltiples necesidades como seres humanos, pero hasta el momento nos ha faltado la sensibilidad para evitar prácticas que contaminan y deterioran el medio ambiente, dijo uno de los oradores al momento de la clausura y la siembra del árbol sagrado del balche.
Que este árbol no sólo nutra la esperanzas de nuestro pueblo, sino que cada vez que lo veamos aquí en el parque principal de Peto, señaló Felipe Tapia Chable, uno de los organizadores del evento, signifique nuestra fortaleza y la identidad que tenemos como pueblo. Por eso es importante que entre todos los aquí presentes, lo reguemos.
En este momento la alcaldesa Martha Raquel González Cámara de Peto y la de Yaxcabá, recibían en la manos de un abuelo maya, el árbol del balché y por su parte, lo entregaron a una pareja de niños y en ese momento inició el ritual a cargo del sacerdote maya, Fernando Caamal Chan.
A través de plegarias y canticos, pidió a los dioses mayas que bendigan estos momentos espaciales para los hijos del maíz, y al termino fue repartido entre los presentes el vino sagrado maya, que proviene de un fermentado de la corteza del árbol sagrado del balché, seguido por el saka, bebida que proviene del maíz.
Este día, niños, jóvenes, adultos y gente de la tercera edad, compartieron momentos especiales. Cada uno de ellos estuvo participando en las actividades de interés, como lo relacionado a los programas forestales, y que fueron atendidos por el personal de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR).
Quienes necesitaban de semillas para cultivar en este temporada, estuvieron en el stand de semillas criollas, intercambiando sus experiencias con los productores provenientes de Timul, Tahdziu, Xoy, Petulillo, entre otras comunidades aledañas a Tekax.
Los niños por su parte, expusieron más de 400 carteles alusivos al tema ambiental, mientras que las señoras, participaron en el concurso de la comida regional, y mientras eso sucedía, jóvenes grafiteros, plasmaban su visión sobre el tema ambiental y la cultura maya.
De esta forma, Peto atestiguó como la raíz étnica es su motor de desarrollo, dejó claro también la necesidad de organizarse para trabajar no sólo en los temas ambientales, sino la necesidad de crear la esperanza en sus jóvenes.
Quedó claro entonces, que la cultura maya sigue viva y fluye con más fuerza en sus niños y jóvenes en este evento comunitario Niños y jóvenes unidos al medio ambiente.
Entre la música juvenil y el canto de los jóvenes del proyecto Trazando rutas de Mérida y el concurso del baile de la jarana, los jóvenes danzantes mostraron sus dotes artísticas, al igual como los grafiteros expresaron en sus pinturas, esa mirada campesina que está conectada a su pasado, presente y futuro como pueblo maya vivo.