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Marco Antonio Calderón Patrón, nuevo director de la policía ministerial del estado, se emcuentra según investigaciones realizadas, inmiscuido en el homicidio del famoso narcotraficante progreseño conocido como el Mono Nicoli, que muriera asesinado hace algunos años, a manos de elementos vinculados al crimen organizado.
Marco Antonio Calderón Patrón y Héctor Cabrera Rivero, titular de la Fiscalía General del Estado
Hace ocho años y seis meses, el nuevo director de la policía ministerial de la Fiscalía General del Estado, Lic. Marco Antonio Calderón Patrón fungía como titular de la Agencia 11 del Ministerio Público con sede en el puerto de Progreso y para esas mismas fechas, (hablamos del 26 de agosto del 2003), fue ejecutado de un balazo en la cabeza el tristemente célebre narcotraficante progreseño Jorge Nicoli Argüelles, conocido en el puerto más comunmente como el Mono Nicoli.
La investigación estuvo a cargo del actual director de la Policía Ministerial cuando fungía como titular de la Agencia 11 del Ministerio Público, caso que nunca fue resuelto y cuyos implicados, Hugo Reyes Domínguez y Felipe Aménica Calderón, tuvieron todas las facilidades para escapar de Progreso.
Jorge Nicoli fue considerado uno de los principales narcotraficantes del puerto de Progreso y según investigaciones realizadas, en esas fechas, estaba vinculado con el Cártel del Golfo cuyo brazo operativo eran Los Zetas, que ahora formaron un cártel independiente de la referida asociación delictiva.
Las indagatorias arrojaron que Nicoli Argüelles tenía vínculos con Felipe Aménica Calderón y con Hugo Reyes Domínguez, sujetos vinculados con el tráfico de drogas en el puerto y quienes actualmente se encuentran prófugos de la justicia. Cabe señalar que el primero, Felipe Aménica Calderón, es familiar en segundo grado de Calderón Patrón.
Horas antes que Nicoli fuera ejecutado de tres balazos y su cuerpo fuera hallado en el kilómetro 20 de la carretera Chicxulub Puerto- Chicxulub Pueblo, Aménica Calderón y Hugo Reyes fueron a verlo a su domicilio con el pretexto de ir a cenar. Eran las diez de la noche del día 25 de agosto del 2003.
Tiempo después, a primera hora del 26 de agosto, el cuerpo de una persona del sexo masculino fue hallado calcinado a un costado de la carretera. La víctima presentaba tres impactos de bala: uno de ellos en la cabeza. Posteriormente se confirmó que se trataba del cuerpo del malogrado narco progreseño, que en ese entonces se encontraba amancebado con Blanca Hernández Tintoré.
Familiares de Nicoli Argüelles incluyendo, a Hernández Tintoré, relataron que la noche del 25 de agosto, Aménica Calderón y Reyes Domínguez fueron a buscar al Mono a casa de sus padres, con el pretexto de ir a cenar y los tres abordaron una camioneta roja Suburban con placas de Jalisco, propiedad de Nicoli Arguelles. Después nadie supo de ellos.
En ese entonces, Marco Antonio Calderón Patrón, a quien los progreseños conocen como un funcionario poco ejemplar y vinculado con gente de dudosa reputación, mantuvo estancadas las investigaciones e indagatorias, con la idea de no implicar en la ejecución a su pariente Aménica Calderón, para que este tuviera tiempo suficiente para escapar.
A partir de ese 26 de agosto del 2003, el expediente de Nicoli Argüelles quedó estancado y conforme pasó el tiempo el caso fue archivado. Por demás está señalar que nunca se trató de localizar a Aménica Calderón y a Reyes Domínguez.
Según ha sido posible averiguar, ambos están en Canadá esperando regresar a Yucatán luego que prescriba el crimen de homicidio que se les imputa.
El encubrimiento del nuevo director de la policía ministerial en el caso del Mono Nicoli Argüelles en la Agencia Onceava y otras muchas irregularidades, motivaron que en 2005 el entonces procurador Armando Villarreal Guerra, lo removiera de lugar y lo reasignara a la ciudad de Mérida, junto con otros agentes asignados, entre ellos el comandante a cargo de la investigación, Ariel García Briceño, quien ahora funge como auxiliar y escolta de los diputados priistas Roberto Rodríguez Asaf y Juan José Canul Pérez.
A casi ocho años del asesinato de Jorge Nicoli Argüelles, los autores materiales siguen prófugos y el responsable de darle carpetazo al asunto, ha sido designado nuevo director de la policía ministerial del estado.