492 palabras
Artículo 7 tiene ya 132 semanas de aparecer, 2 años y 28 semanas. Entre las cosas que hemos denunciado que jamás antes habían sido mencionadas por medio alguno de esta entidad, es el asunto del diario Por Esto!. Allí sigue: no le ha pasado nada. No lo toca el gobierno federal, no lo toca ninguna forma de justicia y, desde luego, trabaja en íntima colaboración con el grupo que hoy ocupa el gobierno de Yucatán. Tiene, además, múltiples demandas por difamación.
Es un medio impreso que ha destruido la realidad en la mente de una buena parte de los yucatecos. Es un medio impreso al cual, los del grupo político en el poder le tienen pánico. Hoy ha manifestado ese temor el juez que estaba llevando el caso de Wafé Kuri Torre.
Exactamente cuando el perito del estado de México reconoce que su veredicto inicial no es el correcto y, con ética mínima, lo cambia ¡el diario Por Esto! se erige en juez de atribuciones especiales —el poder de difamar— y critica al juez del caso por “obedecer a la defensa”!
O sea que, ajustarse al peritaje revisado de un experto —por cierto, este “ajuste” del perito hace que todos los peritajes coincidan— ¡es obedecer los deseos de la defensa!
De gran significancia es, además, que el juez que se encontraba asignado al caso, ¡decide renunciar (al caso) por los dichos del Por Esto!! La presión de ese extraño diario ha causado estragos en Yucatán. Es un ente que sólo puede existir en un lugar de confluencia de los de cierto apellido, más la corrupción del sistema que parecía haberse quedado atrás en 2000. Así como destruyó día a día la imagen de una persona que sigue caracterizándose hoy por especial honradez y transparencia, así como ha difamado con calumnia a empresarios que se negaron a pagarle “la cuota” —exactamente igual a la forma en que opera el crimen organizado, excepto que aún no usa armas de fuego (esperemos)— hoy, al erigirse en “la consciencia del juez”, procede a entrometerse en un proceso para encontrar justicia, dejando en peligro de un mal juicio a un acusado.
“¡No nos obligarán a cambiar nuestra línea editorial!” Ésa fue la exclamación del responsable poresteño cuando se sintió “acosado” por una auditoría fiscal federal (todos los días usa “Fecal” y “El Ilegítimo” para referirse al presidente constitucional de México). ¿Línea editorial? ¿Desde cuando difamar con calumnia sistemáticamente es una “línea editorial”? Yucateco: tú tienes la última palabra.