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...en el mejor de los casos. Cayetana de Alba, noble entre los nobles, está centrada en su boda con Alfonso Díez. Sus hijos ya tienen la herencia repartida prudentemente, así que ahora el enlace está un poquito más cerca. Con un rotundo sí, la Duquesa hizo partícipes a los reporteros de su inmensa felicidad. Por fin suenan campanas de boda...
La Duquesa de Alba con su novio, Alfonso Díez.
La Duquesa de Alba se ha vuelto a escapar para ultimar los detalles de su próximo matrimonio con Alfonso Díez.
Bajo el consejo de su futuro marido, la Duquesa fue a elegir nueva lencería. Juvenil, liberal y coqueta, a Doña Cayetana no le falta de nada, ni siquiera tapujos a la hora de emprender esta nueva vida.
Cayetana de Alba nació en un palacio en 1926. Su futuro marido tiene 58 ó 59 años, no se sabe con precisión. Se dice que hasta el rey Juan Carlos llamó a la duquesa para aconsejarle que no se case. Pero una dama del linaje de Cayetana, cuya fortuna y popularidad alcanzan a las de la Familia Real, no se deja influenciar con facilidad .
El 4 de julio, fecha infausta para los meridanos, la duquesa firmó ante un escribano el reparto anticipado de su herencia entre sus seis hijos: Carlos, Jacobo, Alfonso, Fernando, Cayetano y Eugenia. La fortuna ronda los 3,000 millones de euros.
Así que llevó al funcionario a una tienda de lencería donde las señoras alucinaron con su presencia. La sentaron y le enseñaron todos los modelitos: sexys, convencionales o de lo más atrevidos. No sabemos cuál elegiría la Duquesa, pero sí que renovó su ropa interior acompañada de Alfonso Díez.
El galán conmueve con las palabras que dedica a su futura mujer, a la que define como "humana, increíble, sencilla... tiene una gran energía y es muy cariñosa".
"Me emociona cuando me dice que me quiere, a mí me gusta que me quieran. Y no sólo cuando se dice con palabras, sino con pequeños gestos cotidianos", añade el futuro duque de Alba.
Repartidos los tesoros de la Casa, la duquesa ansía pasar por el altar y vivir un nuevo “hasta que la muerte nos separe”. Los descendientes de la noble anciana respiran aliviados y también se alegran los españoles.
A pesar de su diferencia de edad, Cayetana y Alfonso disfrutan de la vida haciendo cosas normales como "viajar, ir al cine", pero si hay algo que les apasiona es "cenar en casa y ver una película", ha dicho en la entrevista al diario madrileño.
Entre tanta normalidad y pasión hemos descubierto a un Alfonso que a pesar de su timidez asegura que no olvida el día que conoció a la duquesa. Él tenía 24 mientras que ella 48, pero parece que ni la edad ni los posibles opositores han podido con su amor, porque su enlace ya está listo.
La boda será en Sevilla, según la duquesa, pero no ha revelado la fecha.