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Si un bebé o un niño tienen tos persistente, dificultad para respirar y, además, tiene antecedentes de asma en su familia, debe inmediatamente ser valorado por un médico, ya que podría tratarse de asma, una enfermedad que sin la debida atención puede volverse un problema crónico de salud que limitará la vida del paciente, advirtió el Dr. Luis Gutiérrez Solís, alergólogo pediatra del Hospital Regional "Ignacio García Téllez" del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Agregó que esta enfermedad que ocupa el primer lugar como padecimiento crónico en edad infantil, puede presentarse en cualquier edad, incluso en adultos. En el caso de los niños, se creía que los menores de dos años no podían temer asma, por lo que los médicos le daban otro nombre a la enfermedad, como bronqueolitis de repetición, bronquitis asmatiforme y otros más; pero actualmente, ya se acepta el termino de asma en niños pequeños, incluso de dos años.
En amable entrevista, señaló que el asma, como enfermedad infantil, está por encima del cáncer o de problemas renales, tanto en México como a nivel mundial. Su afectación se atribuye a la contaminación ambiental, a la genética y a algunos otros procesos, como las infecciones. A pesar de los adelantos en métodos de diagnóstico y tratamientos, la prevalencia y la incidencia de la enfermedad va en aumento.
Dijo que México; está en uno de los primeros lugares de alergia en general y de asma en los niños, que casi siempre es de origen alérgico. Se estima que 8 o 9 de cada 10 casos de asma tienen origen alérgico, lo que significa que su aparición generalmente va acompañada de la manifestación alérgica, la más frecuente, la rinitis alérgica.
Dr. Luis Gutiérrez Solís, alergólogo pediatra del Hospital Regional "Ignacio García Téllez" del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Preciso que un paciente con asma tiene tres veces más riesgo de desarrollar rinitis y viceversa. También hay otras manifestaciones del asma, como la dermatitis atópica, un proceso inflamatorio, muy característico en niños pequeños, que se exacerba con el medio ambiente caluroso. Tiene la apariencia de una quemadura en la piel.
—Estos procesos, suelen acompañar en ocasiones al paciente asmático. Otro elemento importante para el padecimiento es el clima caluroso-húmedo, que, junto con nuestra genética, hace que Mérida ocupe uno de los primeros lugares de asma infantil. Según estadísticas, en Mérida, 12 o 14 de cada 100 niños ha tenido o tiene asma, una frecuencia por encima del promedio nacional.
Explicó que el asma es una enfermedad latente porque hay un proceso inflamatorio crónico de los bronquios que puede dar manifestaciones. Hay niños que por sólo reír, correr o llorar pueden tener accesos de tos que los lleve incluso al vomito de secreciones y que, por lo tanto, tampoco pueden hacer deporte como debieran porque se agitan y se cansan rápidamente. Otro síntoma es la tos persistente. También puede o no tener dificultad respiratoria, conocida también como asesido.
Señaló que en algunos casos puede presentarse una crisis asmática, donde además de la tos hay dificultad para respirar. En niños grandecitos, puede haber dolor toráxico por el esfuerzo o cansancio para respirar, y si la crisis es muy severa el niño ya no puede hablar en forma continua, por lo que tiene que ser colocado sentado o semi agachadito para respirar.
Sobre las clasificaciones del asma, indico que son leve, moderada y severa; pero también se clasifica en controlada, parcialmente controlada y no controlada. La última clasificación se refiere a las molestias que el paciente va a tener de forma crónica. Se basa en los siguientes parámetros: si el paciente tiene o no molestias en el día; si tiene o no molestias en la noche, cómo despertar por la tos; dificultad respiratoria, si ha requerido medicamentos de rescate en las últimas semanas; y si ha tenido una crisis asmática en el último año. La mayoría se encuentra en el rango de parcialmente controlado.
—¿El asma se controla o se cura? hay el mito de que porque el paciente llegue a cierta edad, el asma va a desaparecer, pero no es así; la edad por sí misma no es motivo para que la enfermedad se controle. El paciente puede tener un periodo sin crisis que le permita desarrollar su vida normal, pero después puede recaer. El tratamiento completo indica que aunque esté en control tiene que acompañarlo algún tiempo con tratamiento preventivo.
En términos prácticos, un paciente que está bien, hace de todo y no requiere medicación, es lo que la gente en general entendería como curación, aunque haya un pequeño riesgo de recaer en algún momento de la vida. El tratamiento completo, que va de uno a cuatro años y que puede alargarse, es la clave para que no tener recaídas.
Agregó que si el paciente abandona su tratamiento por no padecer crisis asmáticas o por sentirse "curado", en edad adulta puede empezar a tener problemas otra vez, que se pueden complicar si fuman. El peligro de una recaída siempre está latente.
Finalmente, informó que el IMSS cuenta con medicamentos de primera línea para dar atención y tratamiento completo a los pacientes infantiles con asma, por lo que pidió a los padres de familia que no subestimen la tos persistente en sus hijos y los traigan a su clínica familiar para una valoración. L.I.