El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, señaló que las recientes críticas de su homólogo mexicano, Felipe Calderón, hacia la supuesta falta de colaboración de Washington en elcombate a la delincuencia se deben a que Calderón "tiene justa frustración" por el fortalecimiento de los cárteles del narcotráfico.

Durante una entrevista con Juan Carlos López para CNN, Obama respondió a las declaraciones de Calderón en el sentido de que la cooperación de Estados Unidos en la lucha contra el crimen "termina por ser notoriamente insuficiente".

"La coordinación, y creo que el presidente Calderón lo reconoció cuando estuvo en Washington, la coordinación de mi administración y a la que estamos comprometidos contra los cárteles de la droga no tiene precedentes", dijo el mandatario estadounidense.

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Obama y Calderón sostuvieron su quinto encuentro bilateral en Washington, la capital estadounidense, a principios de marzo. En esa reunión hablaron de seguridad, migración y otros temas de la relación entre ambas naciones.

"Los cárteles de la droga se han fortalecido y el presidente Calderón tiene justa frustración. Pero digo que tenemos que compartir los problemas y las cargas, tenemos que reducir la demanda de consumo en Estados Unidos", advirtió Obama. "Los dos países van a tener que trabajar conjuntamente por un tiempo prolongado".

Para el presidente de Estados Unidos, "en conjunto la relación con México es muy fuerte", pero reconoció que "ha habido problemas".

Uno de ellos fueron las afirmaciones de agentes de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos estadounidense (ATF, por sus siglas en inglés) de que recibieron órdenes para permitir el tráfico de armas a México como parte de un operativo llamado Rápido y furioso para detectar a bandas de contrabandistas.

Washington admite que existió un operativo con ese nombre pero niega que haya incluido el trasiego controlado de armamento.

"Hemos mandado a un inspector general" para investigar esos señalamientos, dijo Obama. "Hemos iniciado toda una batería de medidas para reducir ese flujo (ilegal de armas) hacia el sur".

Tanto el gobierno de México como los partidos de oposición exigieron que Estados Unidos aclare lo que sucedió en el operativo y tome las acciones necesarias para detener el tráfico de armas a su territorio, pues de ellas se nutren las organizaciones criminales.

"Somos una nación de inmigrantes"

Obama aseguró que su gobierno seguirá impulsando una reforma migratoria integralque, al mismo tiempo, fortalezca la seguridad de las fronteras del país y abra un camino a la legalización a millones de inmigrantes indocumentados. La promoción de esa medida fue una de sus propuestas de campaña en 2008.

"Sigo pensando que podemos tener una reforma inclusiva (...) voy a necesitar la ayuda de los demócratas y de los republicanos (...) voy a hablar con el pueblo de Estados Unidos para explicarles por qué es necesario", dijo.

El Departamento de Seguridad Interior estadounidense (DHS) estima que en el país hay alrededor de 10.8 millones de inmigrantes indocumentados, la mayoría de ellos originarios de México. Ese grupo enfrenta una ola contra la inmigración ilegal en varios estados, encabezada por políticos republicanos y organizaciones conservadores.

"Quiero ser claro para el pueblo de Estados Unidos: somos una nación de inmigrantes, la mayoría de nosotros hemos venido de otra parte (...)necesitamos tener un enfoque inclusivo y vamos a seguir luchando por eso", sostuvo Obama.

El mandatario estadounidense concluyó este martes una gira por tres países de América Latina -Brasil, Chile y El Salvador-, en la que dijo que Estados Unidos espera iniciar una nueva etapa de cooperación con la región.